Tira y afloja de las compañías aéreas por las medidas impuestas por el estado de alarma. Volar con asientos vacíos hará insostenible su negocio, plantean las compañías aéreas tras las protestas de un vuelo de Iberia repleto de pasajeros que no guardaban las distancias de seguridad. Ahora la norma es más clara: podrán volar al 50% de la capacidad del avión.
Las imágenes el vuelo de Iberia Express Madrid-Gran Canaria de este domingo que denunciaron los pasajeros en las redes sociales mostraban un avión casi lleno, con pasajeros a los que no se midió la temperatura antes de embarcar ni se pidió que justificara el motivo de su desplazamiento. No se separó a las personas mayores de los niños, no se dejaron asientos vacíos para garantizar la distancia de seguridad que recomiendan las autoridades sanitarias en España. En fin, el caos.
Sin embargo, esas imágenes no volverán a verse porque desde este lunes, el Gobierno obliga a las compañías aéreas a vender solo el 50% de la capacidad del avión para que se respete el artículo 14 del real decreto del estado de alarma, que establece que en los medios de transporte han de garantizar la máxima distancia posible entre pasajeros.
Sanidad, tras lo ocurrido, recordó a las aerolíneas que tienen que asegurar el cumplimiento de las medidas de seguridad para que "los riesgos se minimicen: puede ser previo al embarque, durante el vuelo o incluso antes de comprar los billetes de avión".
En los aviones, ha explicado Fernando Simón, director del Centro de alarmas sanitarias, al uso obligatorio de mascarillas puede reducir ese riesgo, aunque además se tendrán que asociar otras medidas, y la primera de ellas es que las personas con síntomas no viajen y que las compañías garanticen las medidas de higiene necesarias.