El Ministerio de Sanidad asegura que actualmente no existe ningún producto virucida que esté autorizado para su uso por nebulización sobre personas, por lo que advierte de que la técnica de aplicación que se anuncia en los llamados túneles desinfectantes "de ningún modo" puede ser usada sobre la población.
"Un uso inadecuado de biocidas introduce un doble riesgo, posibles daños para la salud humana y dar una falsa sensación de seguridad", señala Sanidad en una nota sobre el uso de productos biocidas para la desinfección del Covid-19.
Sanidad ha añadido también que la situación extraordinaria por la crisis sanitaria del coronavirus ha generado necesidades de desinfección muy superiores a las habituales y un aumento del uso de biocidas, entre los que se encuentran los desinfectantes virucidas.
El Ministerio de Sanidad explica que estos productos son necesarios para el control de los organismos nocivos para la salud humana, pero precisa que pueden implicar riesgos para las personas debido a sus propiedades intrínsecas y un uso no adecuado, y recuerda que su comercialización y uso se encuentra regulado.
No obstante, hay sustancias biocidas que se encuentran en evaluación en la Unión Europea permitiéndose, a la espera de finalizar este proceso, la comercialización de los productos que las contienen, siempre que se respeten las medidas de seguridad correspondientes.
En este grupo, según Sanidad, se encuentran algunos cuya generación se realiza "in situ" mediante maquinaria, como es el ozono. Este hecho impide, además, que tengan un etiquetado que avise de su peligrosidad y usos, a diferencia del resto de biocidas.
Por ello, para este tipo de biocidas, se recuerda la importancia de seguir las recomendaciones del fabricante.
Y ante la proliferación en el mercado de dispositivos productores de ozono, Sanidad advierte que, al igual que otros biocidas, no se puede aplicar en presencia de personas, y quienes lo apliquen deben contar con los equipos de protección adecuados.
Además, al ser una sustancia química peligrosa, puede producir efectos adversos en las vías respiratorias, irritación de piel y daño ocular.
Por ello, Sanidad advierte de que se deberá ventilar adecuadamente el lugar desinfectado antes de su uso, así como de que puede reaccionar con sustancias inflamables y puede producir reacciones químicas peligrosas al contacto con otros productos químicos.