Donar sangre es un gesto solidario que puede salvar muchas vidas, pero no siempre seremos aptos para hacerlo
La donación de sangre es altruista y no remunerada
Es importante que tu tensión sea adecuada y ser mayor de edad
Donar sangre es un gesto solidario que puede salvar muchas vidas y que bien merece el pequeño trámite de acercarnos a un centro destinado a este fin para ayudar a cubrir esta necesidad social. Toda ayuda es poca teniendo en cuenta que, por ejemplo, en el caso de la Comunidad de Madrid, son necesarias unas 40 donaciones por cada 1000 habitantes y año. O lo que es lo mismo, 900 donaciones diarias en día de diario y 350 los fines de semana. Con todo, no siempre seremos aptos para donar, ya que debemos cumplir ciertos requisitos para hacerlo. ¿Cómo saber si puedes donar sangre? ¿Qué características debes cumplir para ser donante?
Cómo saber si puedes donar sangre: requisitos para ser donante
En España, tal y como recuerda Cruz Roja, la donación de sangre es altruista y no remunerada. Con ello se pretende aumentar la seguridad transfusional de la sangre que vamos a transfundir. Los motivos para ser donante son muchos: el principal de ellos es que, al menos por ahora, la sangre no se puede fabricar y solo puede obtenerse a través de donantes, a lo que se suma el hecho de que la sangre es imprescindible para llevar a cabo operaciones y atender en casos de urgencia. Además, la sangre caduca, de forma que no puede almacenarse indefinidamente.
Con todo, no siempre seremos aptos para donar sangre: debemos cumplir ciertos requisitos objetivos que tienen que ver con nuestro estado de salud y condiciones físicas, tanto por tu seguridad como por la de la persona que reciba tu sangre. Estos son los criterios básicos para saber cuándo puedes donar sangre:
Tu edad debe estar comprendida entre los 18 y los 65 años, aunque es posible que existan excepciones en función de la situación de cada paciente. Un donante regular probablemente podrá seguir haciéndolo a partir de los 65 años.
El peso mínimo es de 50 kilogramos, y el motivo de esta medida es proteger tu salud como donante. Y es que la cantidad de sangre que existe en tu cuerpo depende de tu peso. Aunque no se trate de una ciencia exacta, la barrera de los 50 kg sirve para evitar que la cantidad de sangre que se extrae de tu cuerpo pueda provocar una situación de peligro, al ser proporcionalmente mayor cuanto menor sea tu peso.
Es importante que tu tensión sea adecuada. Por ejemplo, ser hipertenso puede provocar que no debas donar sangre. Un profesional te indicará si es posible o no en tu caso y en ese momento concreto.
Los valores de hemoglobina deben superar ciertos límites mínimos, que en el caso de las mujeres es de 12,5 gr./dL. y para los hombres de 13,5 gr./dL.
No podrás donar más de 3 veces al año en el caso de las mujeres y 4 en el caso de los hombres. Además, debe haber un descanso de al menos 2 meses entre cada donación. En el caso de las donaciones selectivas, estos valores cambian. Por ejemplo, para la donación de plasma no debes superar los 600 ml por donación, el litro por semana y los 15 litros anuales. Además, podrás donar cada 15 días con un límite de 24 donaciones al año. En el caso de donación de plaquetas y leucocitos, deberás dejar pasar 48 horas entre donación y donación, así como descansar dos meses cada 5 donaciones.
En cuanto a los casos de duda más comunes, debes saber que puedes donar sangre aunque tengas la menstruación o tomes anticonceptivos orales, así como cuando hayas consumido aspirina o antiinflamatorios. También pueden donar los alérgicos (pero no en fase crítica) y los hipertensos que tengan niveles correctos en el momento de la donación.
Por último, no podrás donar sangre si padeces enfermedades como hepatitis B o C, sida, sífilis u otra dolencia que se transmita a través de la sangre. Tampoco si convives con alguien que tenga hepatitis B o C. Los diabéticos que utilicen insulina o las personas con epilepsia tampoco pueden donar, así como quienes sufran alguna enfermedad grave o estén siendo medicados.
Existen situaciones puntuales que te invalidan temporalmente como donante de sangre: haberte sometido a una operación quirúrgica (deberás esperar entre 3 y 6 meses), haberte vacunado recientemente de la vacuna de la gripe (tendrás que dejar pasar 3 días) o de hepatitis (7 días), haber viajado a algún país tropical (puede que tengas que esperar hartar un año, en función del riesgo que implique la zona), o haberte tatuado o realizado un piercing recientemente (deberás esperar 4 meses). Además, las actividades de riesgo (intercambio de cuchillas, jeringuillas o cepillos de dientes, relaciones sexuales sin preservativo, acupuntura...) harán que debas esperar al menos un año para donar sangre.
En cuanto a cómo prepararte para donar sangre, se recomienda descansar bien la noche anterior y acudir al centro de donación tras haber ingerido una comida con pocas grasas (nunca hacerlo en ayunas), así como evitar fumar al menos una hora antes de la donación. Si tiendes a tener niveles bajos de hierro, también es aconsejable ingerir alimentos ricos en este mineral previamente, como pueden ser legumbres, frutos secos, huevos o carnes rojas.