Podemos tardar al menos dos años en recuperar la 'antigua normalidad' previa al estallido de la pandemia de coronavirus. Ese es el cálculo de un grupo de expertos reunidos por la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) para quienes la clave de esta transición serán las investigaciones encaminadas a encontrar una o varias vacunas contra la COVID-19. De hecho, esta será "la única terapia que tenemos para erradicar este virus".
Así se ha puesto de relieve en el ciclo de webinars organizado por la Cátedra MySphera en la Universidad Politécnica de Valencia, una serie de charlas digitales que han reunido durante los meses de junio y julio a destacadas personalidades y profesionales de diversas entidades y empresas del sector sanitario y tecnológico. Una de las ideas más repetidas a lo largo de estos encuentros, según informa la Politècnica, ha sido la "ferocidad y virulencia" de esta pandemia".
Juan Antonio Hueto, coordinador de Procesos Quirúrgicos de los Hospitales del Institut Català de Salut, afirma que la pandemia nos ha hecho ver que el sistema sanitario español que no era tan fuerte como pensábamos, debido entre otras razones a la descapitalización a la que se le ha sometido los últimos años. Lamenta también la falta de decisiones rápidas frente al virus así como la falta de apoyo de la sociedad o la desprotección a la que se ha sometido a los mayores. "Ahora, el reto que tenemos que afrontar en esta postguerra del Covid es volver al a situación de normalidad anterior. Y esto nos llevará un par de años, como mínimo", augura.
Para volver a esa normalidad, durante estos webinars se incidió en la importancia de la vacuna, «la única terapia que tenemos para erradicar este virus o al menos llevarlo a unos niveles que sean manejables por los diferentes sistemas sanitarios y por la economía global», apuntó Hueto.
En el mismo sentido se expresaba José Pagan, profesor de Salud Pública en la Universidad de Nueva York, quien afirma que se levanta todos los días "deseando abrir los ojos y comprobar que todo fue un sueño, horrible, sí, pero un sueño". En su opinión, la gestión -y el impacto- de la COVID-19 a nivel mundial ha sido muy dispar y la política, la ideología y la propia cultura de cada país ha influido significativamente en esa heterogeneidad de modelos.
Y sobre la vacuna, es rotundo al "pedir líderes que trasladen un mensaje muy claro de su importancia como solución a este problema".El profesor de la Universidad de Nueva York asegura también que la COVID-19 ha provocado una revolución tecnológica que no tiene vuelta atrás y que quedará arraigada al sistema. "Por ejemplo, creo que la telemedicina llegó para quedarse. También esta pandemia ha abierto las puertas a otras tecnologías, como el uso de apps para analizar y gestionar la expansión del virus; e incluso a otras que van a permitir que los hospitales sean más eficientes y funcionen mejor, al reducir la cantidad de pacientes que puedan coincidir en un lugar, organizar los flujos de personas, organizar las citas, etc", apunta Pagán.
Durante estos webinars quedó claro, al menos en el caso de España, la necesidad de una transformación digital de nuestra Sanidad, que vaya más allá de la teleconsulta. Una transformación que tiene un triple eje de mejora, según expuso Julio Jesús Sánchez, desde el Grupo Telefónica. En los últimos años, Sánchez lidera el equipo de proyectos de Sanidad Digital y centra su actividad en la dirección de proyectos de transformación digital de la sanidad, la telemedicina y la privacidad de los datos sanitarios.
En su opinión, esta transformación digital se centra primero en la satisfacción del paciente, "porque con esta transformación habrá pacientes cuyo acercamiento al sistema sanitario será más cómodo". "Tiene que ver también con su propia salud. Está demostrado científicamente que hay intervenciones remotas que ayudan a mejorar su estado. Y está relacionado igualmente con la eficiencia a la hora de emplear los recursos. En los tres niveles, la transformación digital es clave", señala Julio Jesús Sánchez. En este mismo sentido se expresaron desde Medtronic Germán Gutiérrez (Integrated Health Solutions Business Director), y Jorge Posada (IHS Innovation Portfolio Manager; Project Manager ACTIVAGE).
En su opinión, "ha quedado clara la gran oportunidad de futuro y de presente que supone la digitalización, para mejorar los servicios, los resultados en salud y la seguridad y experiencia de pacientes y profesionales al tiempo que mantenemos los costes en niveles asumibles".
Sobre qué herramientas son clave para responder a una pandemia, el Julio Jesús Sánchez se refirió, entre otras, a las apps de rastreo. "La OMS debería haberlas tenido desde el primer momento, pero no fue así y Apple y Google, las administraciones de diferentes países, etc.tuvieron que desarrollar sus aplicaciones deprisa y corriendo. Como se trata de estar más alerta para la siguiente pandemia -porque estas ocurren, es algo inherente a la biología humana- la app de rastreo debería estar lista para entonces", añadió.
"Si hay una evidencia clara que deja a su paso la crisis sanitaria global es la necesidad de evolucionar. Un progreso necesario tanto a nivel social como en un sector que ha sido clave en los momentos más críticos de la pandemia, la sanidad. Una coyuntura que ha puesto de relieve el inevitable avance que debemos llevar a cabo de la mano de la digitalización y la tecnología. Elementos que hasta el momento hemos tenido al alcance de nuestra mano, pero que, en muchos ámbitos, como el sanitario, no han sido explotados al máximo", concluye Vicente Traver, director del grupo SABIEN-ITACA de la Universitat Politècnica y coorganizador de estos encuentros.