Los granos o bultos en la vagina pueden aparecer por varios motivos. En general, significan que hay una inflamación en las glándulas que lubrican la zona, lo cual no es razón de preocupación, pero si estas bolitas causan dolor o ardor, es preferible consultar a un médico porque puede ser indicativo de algo más. ¿Qué los causa y qué hacer?

En cualquier caso, cuando aparece una inflamación en la región de la vagina debemos pedir cita al ginecólogo para identificar la causa. Las causas pueden ser las siguientes:

Los granitos no son habituales en la zona, pero puede acumularse pus alrededor de la vagina y salir la típica espinilla fácil de reconocer, con cabeza blanca.

Qué hacer: no lo explotes ni uses cosméticos y medicamentos sin consultar a un médico. Generalmente, te dirá que uses una pomada antibiótica o con corticoides, pero como cualquier espinilla debería desaparecer por sí sola pasados unos días.

Los forúnculos son muy comunes. Pueden estar causados por bacterias en la superficie de la piel, que infectan el folículo piloso debajo de la misma. Producen una molestia inflamación que puede ser dolorosa. Generalmente aparecen en la ingle, labios o en la entrada de la vagina.

Qué hacer: si no desaparece en una semana, causa fiebre o aumenta de tamaño con el tiempo, podría ser síntoma de algo más. En cualquier caso, suelen usarse compresas o gasas calientes, cremas antibióticas o antibióticos en pastilla. El médico determinará si se requiere de una pequeña incisión para liberar el pus o no es necesario.

Como en el resto del cuerpo, en la vagina pueden aparecer quistes llenos de pus, aire, líquido u otro material. Lo más frecuente es que se formen por una lesión a las paredes vaginales durante el proceso del parto o después de una cirugía, y suelen desaparecer solos.

Otro bastante comunes el quiste del conducto de Gartner que se desarrolla en las paredes laterales de la vagina después de tener un embarazo, en un conducto que está presente mientras un bebé se está desarrollando en el útero. Si quedan partes del conducto tras el parto, se puede acumular líquido y formarse el quiste.

Qué hacer: se recomienda acudir al ginecólogo para hacer un seguimiento, por si el quiste creciera.

Pueden formarse granitos y espinillas por una reacción en los genitales tras estar en contacto con una ducha, con tampones o toallas, ciertos jabones, medicamentos o algunos detergentes de la ropa, como también pueden estar causados por transpiración o alguna sustancia como la orina o flujo.

Qué hacer: mantener una higiene para evitar que se infecte y esperar a que desaparezca la espinilla sin explotar ni echar cremas de venta libre.

La hidradenitis supurativa es una enfermedad crónica de la piel, que causa protuberancias parecidas al acné debajo de la piel. Es frecuente que las personas que lo padecen lo sufran en zonas como la ingle o la axila, y a veces se explotan por sí solas a través de un absceso, lo cual hace que se drenen el líquido y el pus. Cuando estos sanan, pueden aparecer cicatrices en la piel.

Qué hacer: no hay una cura para esta condición. Suele tratarse con medicamentos que evitan la inflamación y alivian el dolor, que generalmente son tópicos, es decir, se aplican en la piel directamente. También es aconsejable en las personas que sufren hidradenitis supurativa usar ropa holgada, controlar el peso, no fumar, evitar el calor y la humedad y cuidar la piel.

Las glándulas de Bartolino y las glándulas de Skene ayudan a mantener la vulva lubricada. Cuando la piel entra en contacto con bacterias ya sea en un espacio público como un gimnasio o no se tiene la correcta higiene personal, estas glándulas se infectan y puede surgir una bolita en la zona externa de la vagina, que causa mucha molestia.

Qué hacer: las bolitas causadas por este tipo de infección suelen desaparecer pasados unos días. Si no lo hacen y aumentan de tamaño, un ginecólogo realizará un examen y seguramente recetará antiinflamatorios, antibióticos o analgésicos.

Las verrugas genitales salen por infecciones de transmisión sexual, y son relativamente comunes. Afectan los tejidos húmedos del área genital, y a veces pueden causar hinchazón, aunque otras son casi imperceptibles.

Qué hacer: estas verrugas no desaparecen por sí solas. El médico aplicará la crioterapia, microcirugía o aplicación de ácido para eliminarlas, métodos que no causan mayor molestia o dolor.

Las varices en la vulva son inusuales, pero se pueden formar sobre todo después de un embarazo o con la edad. No suele causar hinchazón pero sí un ligero cambio de color y molestia.

Qué hacer: en las embarazadas, las varices no requieren tratamiento y tienden a desaparecer después del parto o pasado poco tiempo. Si causa dolor o mucha molestia, el ginecólogo puede corregir las varices con una cirugía sencilla.

El herpes genital es una enfermedad de transmisión sexual. Puede salir un bultito y causar comezón y dolor, además de aparecer otros síntomas como la fiebre. Hay veces en las que la inflamación desaparece y pasado un tiempo vuelve a aparecer.

Qué hacer: es necesario consultar a un médico cuando el dolor es muy intenso, de lo contrario, generalmente el cuerpo combatirá el herpes por sí solo.