La lucha con la báscula tras la Navidad ya ha empezado: por qué las dietas no nos dan resultado
Se cometen muchos errores con las dietas: el primero, que solo con ella perderemos peso
Los gimnasios siguen aumentando sus ingresos durante 2019
El 27% de los consumidores hace dieta tras la Navidad y el 31% vuelve al gym
La vuelta de las vacaciones de Navidad siempre tiene un denominador común: unos kilos de más, de media entre tres y cinco que nos queremos quitar de repente. Sí, porque el 39% de los españoles afirma que en Navidad no tiene en cuenta el factor saludable de los productos que compra. Y el cuerpo luego, además de en el monedero, nos pasa factura.
Pero son muchos los errores que cometemos pensando que están haciéndolo bien pero sin obtener resultados y llega la depresión porque no logramos bajar un gramo. Estética & Salud Natividad Lorenzo y Novo Clinic nos revelan cuáles son los fallos más frecuentes cuando de perder peso y volumen se trata teniendo en cuenta que seguimos apostando por los gimnasios. De hecho, el mercado de gimnasios cerró el año con un volumen de negocio de 1.075 millones de euros, un 5% más, cifra que no se alcanzada desde hace diez años, según Informa D&B. La "creciente preocupación" por la salud se encuentra entre los factores que explican el incremento de la práctica deportiva. Los expertos aconsejas atacar la obsesidad desde varios frentes: ejercicio, dieta, lucha contra el estrés... porque con una sola pata fracasaremos ante la báscula.
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El 27% de los consumidores hace dieta tras la Navidad y el 31% vuelve al gym
Según el estudio '¿Cómo cambian los hábitos de compra en Navidad?', de Aecoc Shopperview, el 27% de los consumidores se pone a dieta tras las fiestas navideñas y el 31% vuelve al gimnasio. Este factor también condiciona la cesta de la compra de enero. Según el informe, el 48% de los consumidores intenta comer más sano después de la Navidad. Es cierto que no todas las personas tienen la misma facilidad genética para adelgazar o engordar.
Los datos de Aecoc Shopperview indican que el 46% de los consumidores asegura que este año comprará más alimentos saludables, por un 32% que incrementará las compras de productos bajos en grasa, un 31% optará por los artículos sin o bajos en azúcar y otro 31% se decantará por comprar más productos ecológicos. Veremos cómo se convierten las promesas en realidades. Y también hasta qué punto estamos obsesionados con la gordofobia.
Si no combinamos acciones, fracasaremos: y la cirugía tampoco vale sola
Hay gente que apuesta por lo radical a la hora de quitarse kilos de más. La cirugía, pero esta sola tampoco da resultado además de poder presentar riesgos. "Cuando nos hacemos tratamientos estéticos para moldear un cuerpo, adelgazar en esas zonas que nos sobra la grasa y nos marca la celulitis o esos volúmenes que nos hace no estar contentos con nosotros mismos es importantísimo que la persona sea disciplinada con la dieta y con el ejercicio. Es decir, la sinergia de las tres disciplinas ayuda a que al final el resultado a la hora de adelgazar sea un éxito al 100%. No es así cuando hay un problema de salud", explica la experta Natividad Lorenzo.
El exceso de deporte tampoco ayuda
"Mi experiencia me ha enseñado que conjugar las tres disciplinas ayudan muchísimo equilibrio alimentario (comer de todo y poco, no exceso de azucares, alcoholes...), deporte moderado (el exceso de deporte a partir de ciertas edades provoca alteraciones en la salud que al final no ayuda) y tratamientos estéticos (para moldear el cuerpo y bajar más rápidamente de la zona problemática)", concluye la experta.
Según Jenny Vinasco, coach especializada en nutrición natural y Terapia ortomolecular de Novoclinic, desde la visión de la alimentación natural, teniendo en cuenta que se trabaja desde una visión holística se debe trabajar en conjunto; es un error pensar que es sólo la dieta, o que es sólo machacarte con ejercicio y comer mal.
Todo debe ir en armonía e intentar integrar buenos hábitos en todos los aspectos. Un buen descanso, minimizar el estrés que hace que se agoten nuestros nutrientes y que incluso no asimilemos muchos de ellos, hacer ejercicio moderado y habitual es muy importante, no es tanto la intensidad como la regularidad. "Pero desde mi conocimiento y mi punto de vista como Coach especializada en alimentación natural y Terapia ortomolecular; el principal error es hacer dietas extremas", puntualiza Vinasco.
Las dietas de moda no funcionan
Nos descuidamos todo el año y luego cuando llega la cuenta regresiva para lucir palmito nos ponemos en manos de la dieta de moda, que es casi siempre la misma dieta de todas las temporadas pero cambiando su nombre. Son dietas extremas que buscan quemar grasas de manera rápida, las llamadas dietas cetogénicas que básicamente consisten en reducir al mínimo el consumo de hidratos de carbono pasan de un 50-60 % de la dieta a un 10% más o menos. Esta dieta lo que busca es utilizar las reservas de grasas de nuestros tejidos como fuente de energía al no obtenerla de los hidratos de carbono.
Eliminar grasas puede tener un efecto rebote
"Hay muchos dietistas que defienden éstas dietas y otros muchos que no. Desde mi punto de vista no deberíamos recurrir nunca a éstas dietas, ya que son agresivas para nuestro organismo, limitan la obtención de muchos nutrientes, generan muchos residuos metabólicos de las proteínas pero además son insostenibles en el tiempo, lo cual se traduce a un efecto rebote. Si, podemos volver a ganar los mismos kilos perdidos e incluso más. Pero lo más preocupante es cómo puede afectar a la salud el no estar recibiendo la energía suficiente, vitamina, minerales, oligoelementos etc", continua Jenny Viasco.
No todos los hidratos deben ser eliminados de la dieta
Nuestro cuerpo necesita de hidratos de carbono, del 50 al 60% de nuestra ingesta diaria deberían provenir de los carbohidratos, pero no de cualquier carbohidrato sino de los complejos, cereales integrales, fruta, verdura, legumbres... y eliminar el azúcar, los dulces, bollería, harinas refinadas, cereales y pastas refinadas, helados...
Los hidratos se pueden eliminar de las cenas, pero no eliminarlos por completo
En un planteamiento para bajar de peso de forma saludable y dependiendo del caso estos hidratos complejos se pueden reducir o eliminar de las cenas e incluso al principio de la terapia bajarlos a un 35 o 40% de la ingesta diaria, pero nunca eliminarlos. Ellos son nuestra fuente de energía, el combustible que hace que funcione todo nuestro organismo.
Si los eliminamos, el organismo va a recurrir a las reservas de grasa y después cuando no tenga más reservas de grasa recurrirá a las proteínas del cuerpo; cuando esto pasa el cuerpo que es tan sabio recibe la señal de que no está recibiendo combustible y para de quemar guardando las pocas reservas que tiene para las funciones más vitales y es por ello que continuamos con aquellos michelines que se resisten y que por mucho que comamos sólo una hoja de lechuga y una pechuga de pollo a la plancha en el día ellos siguen allí y nosotros terminamos por tirar la toalla con la dieta porque nos encontramos cansados, decaídos, irritables, sin energía. Entramos en un estado donde nuestra salud empieza a resentirse, estamos muertos de hambre y al final caemos en la tentación de zamparnos un donuts y volvemos al punto de inicio.
Hay que eliminar grasas pero aposar por los frutos secos
Otro factor son las grasas. Por supuesto que debemos eliminar las grasas saturadas (grasas malas) que son las margarinas, bollería, embutidos, fritos, etc pero no podemos meter en el mismo saco a todas las grasas; nuestro cuerpo necesita de grasas, nuestro cerebro es en gran parte grasa, las células tienen grasa, y muchas funciones en nuestro cuerpo dependen de las grasas. Por tanto debemos incluir en nuestra dieta siempre lípidos insaturados y con moderación, frutos secos, semillas oleaginosas (sin tostar) pescado azul...
Si tenemos antojos de dulce algo hacemos mal
Concluyendo, cuando tenemos antojos de dulce constante es por falta de hidratos de carbono y de grasas saludables eso hace que queramos comer constantemente bollería, dulces, pan... esto, no sólo no nos sacia sino que se adhiere al tejido y se convierte en grasa, pero además nos provoca una hipoglucemia constante, creamos resistencia a la insulina, engordamos cada vez más y estamos mal nutridos.
Ojo con los tratamientos estéticos para drenar
Lo ideal es una dieta variada, eliminando los azúcares simples, los refinados, grasas saturadas, el exceso de gluten (que inflama y nos hincha...), el alcohol e incorporar carbohidratos complejos, grasas insaturadas, mucha fruta y verdura, beber mucha agua, incorporar proteínas de calidad y en la proporción adecuada, realizar actividad física y por qué no recurrir a otros complementos como la terapia ortomolecular -es una pseudoterapia que recomienda el consumo de grandes cantidades de biomoléculas (generalmente vitaminas) para tratar enfermedades- para afinar más, una desintoxicación de colon, tratamientos estéticos para drenar...