Estamos en plena actividad gripal, los resfriados están en temporada alta y la alergia a las arizónicas se encuentran en el punto álgido y nuestro sistema inmunológico trata de combatir todas estas agresiones. Sin embargo, esta defensa natural del cuerpo contra infecciones y agentes externos en muchas ocasiones se debilita, por lo que no está de más que le echemos una mano con complementos naturales que refuercen las defensas. Las plantas medicinales son un buen remedio para esta época del año, sus principios activos reportan multitud de beneficios terapéuticos.
Echinacea Angustifolia es una planta de la familia de las asteráceas (proveniente de Estados Unidos y Canadá) que se usa en farmacología desde hace cientos de años. Su uso es frecuente para paliar los síntomas del catarro, ya que refuerza el sistema inmunitario y cuenta con propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes. Se considera un antibiótico natural, activa la formación de leucocitos, capaz de disminuir la fiebre, la tos y la mucosidad. Asimismo, se considera un antiviral y bacteriostático.
La Agencia Europea para el Medicamento aprobó su uso para la prevención y tratamiento del resfriado común por vía oral y de manera tópica como coadyuvante en el tratamiento de heridas superficiales de cicatrización lenta, eccemas, quemaduras, inflamaciones o ulceraciones dérmicas. No se aconseja en menores de 12 años y no debe tomarse en aquellos casos en las que las personas se estén sometiendo a tratamientos con corticoides, citostáticos o inmunosupresores.
Nativa de Mongolia y China, Astragalus Membranaceus es una planta perenne de la familia Fabaceae, que suele utilizarse en enfermedades crónicas. Combate la fatiga y el cansancio, la otitis, alivia los síntomas de la alergia, controla la glucosa, es un protector hepático y cuenta con un gran efecto antioxidante, además de favorecer el buen funcionamiento renal.
Asimismo, es un potenciador de los glóbulos blancos (refuerza la inmunidad) y ayuda a la recuperación de las dolencias del aparato respiratorio. La dosis recomendada es de 10 a 60 gramos al día y si se sienten picores, rinitis, náuseas o diárrea debe dejar de tomarse. Está contraindicado para mujeres embarazadas y lactantes.
Esta planta milenaria procedente del sudeste asiático se produce también en Jamaica. Se utiliza tanto como especie como planta medicinal y entre sus características destaca su pronunciado olor y su sabor algo picante. Es una gran fuente de potasio, vitamina C, magnesio, cobre y manganeso. Entre sus propiedades terapéuticas: estimulante gastrointestinal, expectorante y tónico.
Es diurético y un acelerador del metabolismo, previene problemas cardiovasculares y también gripes y resfriados. La raíz es un efectivo tratamiento contra las náuseas. Al igual que con el resto de plantas de esta selección, se recomienda consultar con un médico antes de su consumo. Además, no está recomendado en embarazadas y en periodo de lactancia, personas con afecciones cardíacas, diabéticos y con problemas hepáticos.
Conocida también como hierva cañamera o bismalva, esta planta euroasiática de la familia Malvaceae es cultivada desde la antigüedad por sus propiedades medicinales. Althaea Officinalis alcanza el metro y medio de alto y su raíz es rica en almidón, pectina y taninos, lo que le reporta propiedades expectorantes, diuréticas y cicatrizantes, mientras que sus hojas cuentan con una gran concentración de flavonoides, poderosos antioxidantes con características antiinflamatorias que ayudan al sistema inmunológico.
Asimismo, es de gran ayuda para despejar las vías respiratorias de mucosidad y alivia enfermedades pulmonares y el asma. Además, es eficaz en trastornos digestivos como la gastritis, úlcera gastroduodenal, colitis y síndrome del colón irritable. Tampoco es recomendable para las embarazadas o en la lactancia, ni en el caso de los diabéticos.
Perteneciente a la familia Araliaceae, el Panax Ginseng o ginseng chino se desarrolla en zonas frías y montañosas de China, Corea, Rusia, Japón, México y Canadá. Se utiliza la raíz en polvo desde hace miles de años y sus efectos en la salud reproductiva (disfunción eréctil, eyaculación precoz…) han sido confirmados por multitud de investigaciones científicas.
Pero también se usa para diversos trastornos como la diabetes, el trastorno de déficit de atención, para fortalecer la memoria, mejorar el rendimiento y la concentración y recomponer el sistema inmunitario. Contraindicado en arritmias cardíacas, ansiedad y nerviosismo, mujeres embarazadas, lactantes, niños pequeños o jóvenes en desarrollo.
Nativa del suroeste de la India, la cúrcuma es utilizado como colorantes alimentario y es uno de los ingredientes del curry, una de las especies más conocidas de la gastronomía tradicional hindú. La parte medicinal es la raíz o el rizoma entero, que se tratan por ebullición o vapor y desecado. Conocida también como azafrán de raíz o palillo, su uso tradicional está aprobado para el tratamiento de la indigestión y son relevantes sus efectos antiinflamatorios, neuroprotectores, analgésicos, antivirales, bactericidas y cicatrizantes.
Además, es un antioxidante que ayuda a eliminar los radicales libres del organismo, protege el corazón y reduce el colesterol y es hipoglucemiante. No suele causar efectos secundarios importantes, pero algunas personas presentar malestar estomacal, mareos, náuseas o diarrea.
Es el hongo saprofito herbal con mayor historia en el uso medicinal en la tradición asiática y se encuentra en zonas de clima templado de todo el mundo. En España se le conoce como pipa, aunque la acepción más conocida es la japonesa: reishi. Es una fuente de polisacáridos, pero también contiene lactonas, alcaloides, ácidos grasos insaturados, vitaminas y minerales, entre otros componentes. Cuenta con propiedades antitumorales, inmunoterapéuticas e inmunomoduladores, es un gran antioxidante que ayuda a combatir los síntomas de la vejez.
Por otra parte, ayuda a regular el metabolismo, combate la fatiga y ayuda a descansar. Entre los efectos secundarios se pueden producir mareos, boca seca, malestar abdominal y sangrado de la nariz. Puede, además, disminuir la presión arterial y se desaconseja en enfermedad autoinmunes, embarazadas, lactancia y en niños.