Después de unos días duros con los niños en casa, los menores ya pueden salir a la calle. Pese a la difícil situación, el confinamiento y las salidas a la calle en tiempo de coronavirus pueden ofrecer una buena oportunidad para fortalecer los lazos familiares y que las necesidades psicológicas de los niños puedan quedar satisfechas.
En este artículo, la Asociación de Psicología del Niño y del Adolescente de España ofrece una serie de recomendaciones para ayudar a los niños en casa y en las salidas a la calle en esta situación tan especial:
· Guarda todas las distancias y cumple con todas las medidas recomendadas. Dar ejemplo es muy importante en la educación de los hijos.
· Si te encuentras con conocidos habla de forma natural y espontánea (manteniendo las distancias).
· Anticípales los cambios: "Vamos a ver a menos personas por la calle", "No vamos a poder ir al parque pero si dar paseos", "No vamos a poder abrazar a los abuelos, pero si mandarles muchos besos desde la distancia".
· Explícale las medidas de seguridad como precaución o prevención, no como alarma o peligro. Por ejemplo le puedes decir que "si saludamos a los amigos y familiares desde la distancia adecuada nos estamos cuidando a nosotros mismos y a los demás".
· Anímales a salir, sin obligarles. En estos días hay muchos niños que por diferentes motivos no están queriendo salir a la calle. Pregúntale los motivos e intenta darle argumentos para motivarle. "¿Por qué no quieres salir? ¿Cómo estás?" "Si sales puede que te encuentres mejor. ¿Lo intentamos?".
· Guardar la distancia si se hace de una forma lúdica, mejor. Un ejemplo puede ser ensayar con ellos gestos de saludo con la mímica. Así aprovechamos la espontaneidad y la naturalidad de los niños.
· Hasta junio los niños están "en el cole". Planifica las salidas a la calle después de asistir virtualmente a clase o después de hacer los deberes.
· Programa las salidas en el mismo horario para incluirlo como rutinas.
· Planifica distintas rutas dentro de la distancia permitida para que aprovechar el espacio. Así se hace más entretenido y los niños reciben más estimulación sensorial.
· Utiliza en las salidas distintos elementos. Un día paseo, otro bici o patinete.
· Anticípales la vuelta a casa. Igual que cuándo están jugando con la videoconsola o utilizando el móvil: "Vamos a dar un paseo de una hora","Vamos hasta el ayuntamiento y volvemos" "!Ya vamos por la mitad del camino!"
· Es momento de muchas pérdidas. Quizás también de valorar lo que tenemos y no habíamos valorado antes. Puedes planteárselo a tus hijos no desde la queja sino desde la celebración.
No sólo podemos aprovechar las salidas, también se puede trabajar su salud mental desde casa. Para lograrlo también se pueden seguir unas pautas:
· Crea un horario para ayudar a vuestro/s hijo/s a gestionar mejor las emociones producidas por esta situación tales como la tristeza, la ira, el nerviosismo o la incertidumbre. El horario es aconsejable que tenga horas de clase, estudio, juegos, amigos, momentos familiares y momentos para que pueda estar solo disfrutando de alguna afición.
· Cuidados "básicos": la alimentación, un patrón de sueño regular, y una buena higiene personal. Además de asearse, vestirse "de calle" por las mañanas puede ayudarles a situarse mejor y cambiar "el chip" para afrontar mejor su día a día.
· Moverse no sólo el momento de estar en la calle. Es importante que se muevan y hagan deporte a diario también dentro de casa.
· Estos días hay muchas horas libres, y muchos de vuestros hijos querrán pasar muchas horas "pegados" a las pantallas. Usa un temporizador e incluye esas horas dentro del horario como horas de ocio. Ya sea jugar a la Play 4, ver stories de Instagram o vídeos de Tik Tok.
· Cuidado emocional: Comunica tus emociones. Eso será un ejemplo para ellos y les ayudará a mostrar afecto: "Estoy contento", "me siento alegre", "yo también estoy un poco aburrido".
. Pregúntale cómo se siente. Os propongo dedicar 10 minutos día/hijo para hacerles la pregunta: ¿Qué sientes? Y dejarles comentar lo que necesiten. También puedes preguntarle si echa de menos el colegio o a sus amigos. Es importante ayudarles a aceptar lo que sienten (miedo, tristeza, etc.).
· Afecto y autoridad. Ayúdales a cumplir las normas que tengáis en casa. Exige, con afecto, cariño y apoyo: "Eso está mal hecho. Ahora te explico cómo se hace bien".
· Es momento de sacar a pasear en casa a la creatividad. Utiliza juegos, cuentos, canciones y todos los recursos recreativos y lúdicos que se te ocurran.
· Intenta reconstruir tu relación con tu hijo. Crea encuentros individuales. Momentos especiales padre-hijo y madre-hijo haciendo alguna actividad que le interese a tu hijo. Le puedes preguntar: ¿Qué te apetece que hagamos juntos?
· No exponerles a conflictos familiares (tensión entre padres). Aunque estemos viviendo en un "Gran Hermano" es aconsejable que los niños no visualicen las discusiones paternales. Busca algún lugar de la casa (ej: habitación) para mantener ese tipo de conversaciones y discusiones.
· ¿Problemas económicos y anticipación de problemas sociales? Dejemos a los niños ser niños. Aunque te preocupe mucho la situación que está viviendo el país y la gestión de las distintas autoridades, es mejor que proporciones a los niños un clima de calma, seguridad y confort.
· La capacidad de encontrar humor en este tipo de situaciones es muy importante. Mucho sentido del humor. A los niños y adolescentes les encanta que te rías de sus cosas, de las cosas que hacen o dicen (y si les puedes hacer también reír, mejor).
· Enséñales a aceptar el error. Si te equivocas (puede ser que en estos días haya habido alguna palabra subida de tono o algún momento de menos autocontrol, incluso algún insulto o descalificación) pídele perdón. Así aprenderá a pedirlo él cuando tenga que hacerlo: "Me he equivocado. He hablado demasiado fuerte y he dicho cosas que no pienso. Lo siento".
· A nivel social se ha despertado la solidaridad, la unión, el compañerismo. Puedes invitar a tus hijos a participar en algún proyecto o idea solidaria. Ej: Escribir cartas a personas que están en los hospitales. Ayudar a los demás, ayuda.