Hoy le ha tocado a los alumnos de la escuela de Sant Adrià del Besòs, que ya ha tenido que confinar tres aulas. Además de a alumnos y profesores también se harán, de forma voluntaria, a los padres de los estudiantes. Hay nervios, pero los pequeños saben perfectamente a lo que se enfrentan "una pcr para saber si tenemos coronavirus o no". Algunos lo dicen como si fuera toda una aventura, "nos van a meter un palito". Lo que han intentado los profesores y los padres es que no se asusten con los médicos que les van a hacer las pruebas, por eso les han dicho que van a visitarles hombres vestidos con trajes de astronauta.
Las pruebas también son para los mayores, los padres, porque de nada sirve controlar a los más pequeños si no se sabe si traen el virus de casa. "Todos los padres debería tener responsabilidad y hacerse la prueba", señalan los expertos aunque las pruebas no sean obligatorias. Estamos ante unos cribados muy importantes porque en las aulas, según los primero informes, apenas hay transmisión del virus. El 87 por ciento de los alumnos infectados no ha contagiado a ninguno de sus compañeros.
La realidad es que los padres se han ido animando viendo el vídeo que les han facilitado para que supieran realmente cómo eran las pruebas. "Algunas personas que habían dicho que no, después de ver el vídeo han traído la autorización y han dicho que sí. "Los niños están haciendo vida normal, están super tranquilos, yo creo que son los más tranquilos de todos", comentan en el colegio.
"Nos dijo la profe que no nos asustáramos porque van a aparecer astronautas. Yo estoy tranquilo, a mi me da igual que me hagan pruebas, por mi mejor", dice un pequeño. "Vienen médicos que tienen trajes de astronautas".