La consejería de salud de Castilla y León ha abierto una investigación por el fallecimiento de otra mujer que no consiguió recibir atención médica de forma presencialpresencial por la pandemia de coronavirus. Ya en marzo, Lidia comenzó a encontrarse muy mal y por teléfono le diagnosticaron gastroenteritis y miedo al contagio pero, era algo gravísimo, dos tumores muy agresivos.
"Estoy agotada de no dormir ¿sabes? Y no puedo con mi alma. Tanto haber vomitado en tan poco tiempo". Era el 29 de marzo y Lidia se encontraba muy mal. "Tenía unos dolores muy intensos. Estaba amarilla, con siete kilos menos. No comía nada, lo expulsaba todo", cuentan sus familiares.
"Hablaba con la médica de cabecera pero nada, todo por teléfono", comenta Carlota Gómez, sobrina de la fallecida. La doctora nunca la recibió en persona y el diagnóstico fue el mismo durante semanas. Aguantó así hasta junio y, por fin, cuando comenzó la desescalada, su hermana pudo visitarla. "La vi la muerte en los ojos", recuerda Fátima.
Lidia no tenia gastroenteritis, unos análisis indicaron que lo que tenía eran dos tumores muy agresivos. Cuatro meses después de su primer dolor, fue operada. Murió días después por un fallo multiorgánico. Las autoridades ya investigan la muerte de la mujer. Se trata del segundo fallecimiento por causas similares. El pasado mes de agosto, otra mujer falleció en Burgos de un cáncer de colon con metástasis sin lograr ni una cita presencial con su médico de cabecera.