La Comisión Europea ha informado de la firma de un contrato marco con la farmacéutica británica GlaxoSmithKline (GSK) para la compra de hasta 222.000 dosis de sotrovimab, un anticuerpo monoclonal en fase de investigación contra la covid19, que se encuentra ya en proceso de evaluación en tiempo real de desarrollo por la Agencia Europea del Medicamento (EMA).
El tratamiento, desarrollado por GSK y la estadounidense Vir Biotechnology, es uno de los cinco primeros fármacos identificados por Bruselas para crear una cartera común de medicamentos contra el coronavirus. Se trata de un anticuerpo monoclonal de dosis única para el tratamiento de la covid19 leve a moderada en adultos y pacientes pediátricos (mayores de 12 años y que pesen al menos 40 kg) que no requieren suplemento de oxígeno y que tienen un alto riesgo de progresión a COVID-19 grave.
El uso de sotovimab está pensado para pacientes de coronavirus con síntomas leves que no requieren suplemento de oxígeno pero que corren el riesgo de sufrir una evolución a caso grave, según ha explicado la Comisión, que destaca que los estudios en curso apuntan que un tratamiento temprano puede reducir el número de pacientes cuya evolución obliga a su hospitalización o ingreso en la UCI.
Los cuatro anticuerpos monoclonales identificados para la cartera europea son :
A ellos se une el inmunosupresor baricitinib desarrollado por Eli Lilly, empresa que ha solicitado una extensión de la autorización comercial que ya ha sido otorgada para que el producto pueda utilizarse también en enfermos de COVID-19.
El Ejecutivo comunitario quiere tener una cartera de al menos diez potenciales medicamentos contra la COVID-19 para octubre, que seleccionará mediante "Un proceso objetivo y basado en la ciencia y con criterios acordados con los Estados miembros".
La estrategia que elaboró la institución comunitaria recoge la meta de que al menos tres de estos medicamentos sean autorizados por la EMA en octubre y otros dos obtengan su permiso para finales de año.
Además, la Comisión Europea ha concluido recientemente una compra conjunta de anticuerpos monoclonales (casirivimab y amdevimab) y ha asegurado que estudia la posibilidad de lanzar más negociaciones antes de que acabe 2021.
La carrera entre varias farmacéuticas para desarrollar un tratamiento en forma de pastilla contra la covid-19 se está acelerando, con una firma japonesa iniciando los ensayos clínicos y sumándose a gigantes como Pfizer y MSD (Merck Sharp & Dohme).
La empresa nipona Shionogi comenzó las pruebas con humanos de su pastilla, que sería de una dosis diaria, y que busca neutralizar el virus en un plazo de días una vez que una persona se contagia, según recoge este domingo The Wall Street Journal.
“Nuestro objetivo es un producto oral seguro, como Tamiflu, como Xofluza”, dijo al diario el consejero delegado de la compañía, Isao Teshirogi, haciendo referencia a dos medicamentos que se usan contra la gripe.
Shionogi, que en el pasado ha tenido éxito entre otros con un medicamento para reducir el colesterol, va todavía por detrás de Pfizer y de MSD, que tienen estudios más adelantados sobre este tipo de tratamientos.
Estas pastillas para la covid-19 están pensadas para que los enfermos las utilicen cuando tienen síntomas leves y se encuentren en sus casas, a diferencia de los tratamientos que más resultados han dado hasta ahora, como el Remdesivir, que tienen que administrarse en hospitales y que en general se reservan a pacientes más graves.
En el caso de Pfizer, la compañía ha dicho que su pastilla, que se tomaría dos veces al día y que es parecida en su diseño a la de Shionogi, podría estar lista para salir al mercado tan pronto como este año.
MSD, mientras, está utilizando una fórmula estudiada hace años como posible respuesta al ébola y ha dicho que por ahora se ha demostrado efectiva a la hora de reducir la carga viral de los pacientes de covid-19 y podría reducir el riesgo de hospitalización.