Cerca de un 30 % de los médicos internistas -colectivo que ha atendido a 8 de cada 10 pacientes COVID-19 no críticos hospitalizados- ha tenido que separarse de sus convivientes habituales o allegados durante los meses más duros de la pandemia por miedo a contagiarlos. Así lo refleja un sondeo llevado a cabo por la Sociedad Española de Medicina Interna (Semi) en el que han participado 1.015 internistas (638 mujeres y 377 hombres), con una edad media de 39,9 años.
Casi la totalidad de ellos -el 92,18 %- ha atendido en primera línea a pacientes con coronavirus y un 86,77 % se ha mostrado preocupado por la posibilidad de infectar a sus familiares o allegados. Por ello, el 29,8 % ha indicado que ha tenido que separarse en la pandemia de sus familias por miedo a contagiarlos.
El estudio pretende evaluar el impacto de la crisis sanitaria vivida en los hospitales españoles por COVID-19 tanto en el bienestar físico como emocional de los especialistas en Medicina Interna, que han atendido a 8 de cada 10 pacientes COVID-19 no críticos hospitalizados.
Sobre las medidas de protección, 3 de cada 10 manifiestan no haber podido acceder, siempre que lo han necesitado, a Equipos de Protección Individual (EPI), frente al resto que sí confirman haber podido disponer de ellos. El 17,44 % de los internistas participantes en este estudio se ha infectado.
La Semi destaca que 7 de cada 10 internistas aseguran haber adquirido más responsabilidades durante la pandemia, aunque esta situación no ha sido reconocida "en modo alguno".
Para 8 de cada 10 especialistas en Medicina Interna, las horas de trabajo en el hospital se han incrementado durante la pandemia y sólo un 27,93 % afirma haber obtenido algún tipo de compensación por ese exceso de trabajo.
No obstante, la mayoría de los descansos tras las guardias han sido respetados, pero seis de cada diez internistas no han tenido vacaciones en el último semestre.
Por otro lado, el 44,74 % de los consultados ha pensado, en algún momento, en trabajar en el extranjero y casi seis de cada diez se han planteado alguna vez "abandonar la medicina". Como conclusión, la Semi advierte de que 4 de cada 10 internistas muestran signos del Síndrome de Burnout o "síndrome del trabajador quemado"