China es el espejo en el que se mira todo el mundo, y especialmente España. El país que fue origen de esta epidemia está saliendo de ella y es inevitable todos los demás sigan uno a uno sus pasos. Una crisis que hace un mes parecía un problema lejano con medidas, como el confinamiento, que aquí parecían imposibles.
Sin embargo, uno a uno, España ha ido siguiendo los pasos de Wuhan. Los primeros casos aislados, la propagación y la cuarentena posterior. Un encierro que dejó imágenes de detenciones para aquellos irresponsables que se lo saltaban. Estampas que ahora se ven aquí con la policía multando en las calles.
Otro de los ejemplos, se observa en los hospitales levantados en tiempo récord. El mundo se asombraba de como en Wuhan se levantaba un hospital desde 0. Sin embargo, aquí el Ejército ha montado un hospital de campaña en IFEMA en apenas 48 horas.
Una lucha contra el Coronavirus que avanza lenta, pero en la que se celebra cada una de las pequeñas victorias. En China se celebraba cada salida de la UCI o cada alta con aplausos y vítores. Homenajes que se repiten aquí a cada uno de los pacientes que logran recuperarse.
Pero hay un motivo para la esperanza. En China, dos meses después están comenzando a salir de la cuarentena y a recuperar la normalidad. Otra de las imágenes en la que se debe mirar España.