Las enfermedades cardiovasculares: armas para combatir al asesino de masas en el mundo
Lucía SicreMadrid
¿Qué son las enfermedades cardiovasculares?Pixabay
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo: aprende a prevenirlas
Limita la sal, como fruta y verdura cinco veces al día y olvida el tabaco
Enfermedades del corazón provocan hipertensión, arteriosclerosis, insuficiencia cardíaca congestiva o emboliass
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de defunción en todo el mundo. Cada año mueren más personas por alguna de estas enfermedades que por cualquier otra causa. Según lo datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades cardiovasculares afectan en mucha mayor medida a los países de ingresos bajos y medios: más del 80 por ciento de las defunciones por esta causa se producen en esos países y afectan casi por igual a hombres y mujeres. ¿Qué son las enfermedades cardiovasculares? ¿Qué tipos de enfermedades cardiovasculares existen y cómo prevenirlas?
Las enfermedades cardiovasculares son un conjunto de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos. Se clasifican en hipertensión arterial(presión alta), cardiopatía coronaria (infarto de miocardio), enfermedad cerebrovascular (apoplejía), enfermedad vascular periférica, insuficiencia cardíaca, cardiopatía reumática, cardiopatía congénita y miocardiopatías.
Este tipo de dolencias son la causa principal de mortalidad en todos los grupos étnicos y raciales, y muchas veces se presentan sin dolor y sin síntomas claros. Este es el motivo por el que muchas veces no se tratan adecuadamente, lo que puede provocar problemas de salud aún más serios e incluso mortales, como es el caso del ataque al corazón, la embolia y el daño a los riñones. Tal y como recuerda Rioja Salud, lo más peligroso de las enfermedades cardiovasculares es que puedes padecer más de una a la vez sin siquiera saberlo.
¿Cómo prevenir las enfermedades cardiovasculares?
El desarrollo de las enfermedades cardiovasculares está asociado con algunos hábitos y comportamientos específicamente nocivo a la salud. Según los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades (en inglés, CDC), esos comportamientos son:
Consumo de tabaco. Fumar provoca la formación de una placa en las paredes interiores de las arterias. El resultado es un importante factor de riesgo: los fumadores tienen dos veces más probabilidades de desarrollar las enfermedades cardiovasculares en comparación con los no fumadores.
Falta de actividad física. Llevar una vida sedentaria o con poca actividad física es otro factor de riesgo. Los individuos que no mantienen una actividad física adecuada tienen también dos veces más probabilidades de desarrollar enfermedades cardiovasculares en comparación con quienes se mantienen físicamente activos. Además, el sedentario también puede predisponer a padecer obesidad y/o diabetes, dos condiciones que pueden desembocar en enfermedades cardiovasculares.
Malos hábitos de alimentación. El sobrepeso es un factor de riesgo en cuanto a enfermedades cardiovasculares, así como el colesterol elevado, asociado a una mala alimentación. Las personas obesas tienen más posibilidades de desarrollar hipertensión y otras condiciones crónicas cardiovasculares que aquellas personas que mantienen un peso saludable. Como dato que pude arrojar luz sobre la importancia de la alimentación (y sobre nuestros malos hábitos en general), se calcula que solamente el 18 por ciento de las mujeres y el 20 por ciento de los hombres consumen las cinco porciones recomendadas de frutas y verduras por día.
Tener una historia familiar de enfermedades cardiovasculares. Aunque se trata de un factor incontrolable, conviene tenerlo muy en cuenta. En caso de que existan antecedentes de enfermedades cardiovasculares en tu familia, deberás extremar el cuidado en cuanto a tus hábitos de salud para no favorecer la aparición de este tipo de dolencias.
¿Cómo puedo prevenir las enfermedades cardiovasculares?
El adoptar comportamientos saludables puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar condiciones cardiovasculares:
• Evita toda clase de consumo de tabaco y humo de segunda mano.
• Empieza un programa regular de actividad física.
• Consume alimentos saludables bajos en colesterol y grasas saturadas.
• Disminuye el consumo diario de sal y sodio.
• Mantén un peso saludable.
• Come bastantes frutas y verduras.
Ejemplos de enfermedades cardiovasculares: conoce las condiciones que provocan
Es importante conocer las condiciones que se asocian con este tipo de enfermedades. Son las siguientes:
La alta presión sanguínea o la hipertensión. Esta condición suele comenzar sin síntomas. Ocurre cuando la presión de la sangre contra la pared de las vías sanguíneas está constantemente más elevada de lo normal.
Endurecimiento de las arterias o arteriosclerosis. Se trata del proceso de enfermedad que provoca el endurecimiento paulatino de las arterias, que ocurre al envejecer. Las arterias se vuelven menos flexibles, lo que hace más difícil que la sangre pase a través de ellas.
Bloqueo de las arterias. Las arterias se bloquean cuando la capa interior que les sirve de protección se daña. Entonces se permite que se acumulen sustancias en el interior de la pared de la arteria. Esta acumulación está formada principalmente por colesterol, materiales de desecho de las células y materias grasas.
Ataque al corazón. Un ataque al corazón ocurre cuando un coágulo bloquea parte o todo el abastecimiento de sangre que va directamente al músculo del corazón. Si el flujo de sangre se cierra por completo, el músculo del corazón empieza a morir.
Embolia. La embolia sucede cuando un vaso sanguíneo que abastece de sangre al cerebro se bloquea parcial o completamente. Ello provoca una incapacitación del cerebro, debida a la reducción del flujo de sangre. El impedimento al cerebro a su vez resulta en la pérdida de movimientos del cuerpo controlados por esa parte del cerebro.
Insuficiencia cardíaca congestiva. Esta condición se produce cuando el volumen de sangre que sale en cada latido del corazón disminuye, a causa de un funcionamiento anormal del músculo del corazón o de las estructuras de las válvulas. En estos casos, el abastecimiento de sangre a los tejidos del cuerpo no es suficiente para cumplir con la demanda apropiada de oxígeno que los tejidos necesitan para el trabajo biológico.