El 36 % de los médicos que trabaja en la sanidad pública española tiene un contrato temporal y la mitad de ellos llevan más de 6 años sin conseguir una plaza, unas cifras que afectan más a las mujeres, los menores de 40 años y los de nacionalidad extranjera.
Estas son algunas de las conclusiones de la "Encuesta sobre la situación de la profesión médica en España" realizada por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) y la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) a finales de 2019 (antes de la pandemia de coronavirus) y presentada este lunes.
El doctor Miguel Ángel García, uno de los autores del informe y miembro del sindicato Amyts, ha explicado que esta temporalidad se ha ido reduciendo a un ritmo pequeño durante los últimos tres años gracias a las convocatorias de oposiciones pero, al mismo tiempo, se dan casos de profesionales que llevan muchos años encadenando contratos, un hecho que ha llegado hasta los tribunales.
Así, la encuesta ha detectado que un 8 % de los sanitarios temporales llevan así más de 20 años y, aunque los porcentajes son mayores entre los profesionales más jóvenes, también hay profesionales mayores de 60 años que siguen encadenando contratos.
García ha destacado que la temporalidad es mayor en Cantabria y Canarias, donde se sitúa por encima del 45 %, seguidos de Madrid, Andalucía y Baleares.
Esta encuesta ha preguntado también por las guardias que realizan los médicos y ha concluido que, aunque la mayoría de ellos libran siempre o casi siempre el día después de realizarla, uno de cada diez profesionales asegura que no descansa "nunca" la jornada posterior a las guardias.
Las especialidades más representadas entre los encuestados que realizan guardias son Medicina de Familia, Anestesiología, Pediatría, Medicina Interna y Obstetricia y Ginecología.
En cuanto a los MIR, la mayoría de ellos (el 65,2 %) realizan 5 ó 6 guardias al mes y sólo el 47,7% libran siempre después de ésta.
A pesar de que la encuesta -en la que han participado 19.641 profesionales de todas las provincias y especialidades- se hizo entre octubre y noviembre del pasado año, es decir, varios meses antes de que comenzara la pandemia de coronavirus, los sanitarios ya evidenciaban un importante descontento con las condiciones en las que desempeñaban su trabajo.
Así, el 35,3 % de los médicos aseguraba sentirse insatisfecho con el ejercicio de su profesión debido fundamentalmente a la carga laboral o asistencial (el 65,2 %), seguida del nivel de exigencia (32,9 %), mientras que la mayoría de los encuestados (un 55,7 %) se sentía emocionalmente cansado.
Por otro lado, el 43,6 % de los sanitarios habían tenido problemas de conciliación de la vida laboral y personal y, como consecuencia, habían recurrido a las reducciones de jornada (13,1 %) y permisos sin sueldo (10 %), especialmente las mujeres, según ha detallado la doctora Sonsoles Castro, que ha indicado que el 80 % de las excedencias son solicitadas por sanitarias.
Todas estas situaciones condicionan la actitud de los médicos ante la jubilación, tal y como ha indicado el secretario general del CESM, Gabriel del Pozo, que ha recordado que, si bien hace años muchos médicos querían seguir trabajando hasta los 70 años, ahora son cada vez más los profesionales que están deseando que llegue la edad de jubilación, e incluso planean retirarse antes aunque pierdan dinero.
Los datos de la encuesta señalan que casi 4 de cada 10 médicos mayores de 55 años piensa jubilarse cuando le corresponda por edad, un tercio (32,6 %) estaría dispuesto a prolongar su actividad laboral y el 13,7 % quiere adelantar voluntariamente su jubilación.
Castro ha detallado que también aquí hay diferencias por sexo, ya que sólo 2 de cada 10 mujeres estaría dispuesta a prolongar la vida laboral y sería por motivos económicos, mientras que en el caso de los hombres, 4 de cada 10 prolongarían su vida laboral movidos por la satisfacción que les produce su trabajo.