El ministro de Sanidad, Salvador Illa ha dejado claro que habrá un plan de vacunación a finales de año. Y más allá ha ido el consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, que ha avanzado este viernes que, una vez se reciban en Andalucía los primeros lotes de vacunas contra el Covid-19, que serán entre 250.000 y 300.000 y llegarán para "la pretensión de Salud es que se pongan "en domicilio" y primero a las personas mayores y "en riesgo".
En rueda de prensa en el Hospital Reina Sofía de Córdoba para presentar el plan de inversiones en infraestructuras sanitarias de la Junta para dicha provincia, Aguirre ha subrayado, en primer lugar y respondiendo a las críticas que ha recibido por anunciar que Andalucía recibirá las primeras vacunas contra el coronavirus en diciembre, que ha sido la propia Unión Europea (UE) la que ha anunciado que esas vacunas se distribuirán "a finales de noviembre", recordando Aguirre que España se ha sumado a la compra centralizada de "300 millones de vacunas" que hará la UE y que Andalucía se suma a la compra de España.
La cuestión, según ha precisado Aguirre, es que, "a nivel de España, llegarán para diciembre 1,5 millones de vacunas", con lo que a Andalucía, que toma parte en la compra centralizada que hará España, le corresponderán de este primer lote "entre 250.000 y 300.00 vacunas, de las que podríamos disponer a finales de diciembre", aunque el consejero de Salud espera "que sea antes", teniendo en cuenta el citado anuncio de la UE de que "para finales de noviembre podríamos tener ya disponibilidad de la vacuna Oxford".
Al saber que la vacuna "no viene precargada", Aguirre ha anunciado también que la Junta ya había programado hacerse con las jeringas necesarias para inyectar las dosis de vacunas, a razón de dos por persona, razón por la que Salud ya había previsto aprovisionarse de "25 millones de jeringas, con agujas, específicas para vacunas".
En cuanto a los criterios de vacunación, Aguirre ha señalado, respecto a los criterios de vacunación, que se empezará "con el eslabón más débil de la cadena epimediológica", lo que implica que se comenzará "por las residencias de mayores", añadiendo que se intentará "hacer la vacunación en domicilios".
Con ello se quieren evitar las colas ante los centros de salud, con lo que la vacunación, según pretende el consejero de Salud, se haría "a través de Enfermería, a nivel de domicilio", y se empezará "con personas de mayor edad y en riesgo, igual que haremos con la vacuna de la gripe".
En cuanto a la situación general en Andalucía de la "segunda oleada" del Covid-19, Aguirre ha destacado que está por debajo de la mayoría de las comunidades autónomas (CCAA) en número de casos confirmados por PCR en los últimos 14 días, con 115 por cada 100.000 habitantes, frente a los 212 casos de media a nivel nacional, quedando por debajo de Andalucía solo comunidades uniprovinciales, como Asturias y Cantabria.
Aún así, según ha advertido Aguirre, "no nos podemos llamar a engaño, la incidencia" del coronavirus "es muy alta en Andalucía", añadiendo que las cifras "son muy preocupantes", sobre todo si se comparan con las del "resto de países de Europa", y en ese caso "son altas", añadiendo el consejero de Salud que le preocupa especialmente la situación de las residencias de mayores en Andalucía, a pesar de que, en estos momentos, de las 1.107 residencias existentes, "el 87 por ciento están libres de Covid, pero va aumentando el número de residencias con positivos".
El consejero de Salud ha puesto como ejemplo de ello la Residencia de Luque (Córdoba), en la que se han confirmado "24 positivos, de los que seis son trabajadores y 18 residentes", de un total de 16 empleados y 24 ancianos, habiendo previsto ya la Junta, en colaboración con el Ayuntamiento de la localidad, trasladar al albergue municipal a los residentes no infectados, para separarlos de los que han dado positivo en Covid-19, de los que dos han tenido que ser hospitalizados.
En cuanto a las medidas adoptadas para procurar un comienzo seguro del curso en Educación Primaria y Secundaria, Aguirre ha resaltado que, en los dos últimos días, se han hecho a los profesores "51.173 test" del Covid19, a lo que se suma el "abastecimiento de mascarillas e hidrogel" y muchas otras medidas, previstas en el protocolo establecido para ello y, sin embargo, el consejero de Salud entiende que "posiblemente" se tendrán que "cerrar colegios" como consecuencia del coronavirus, si bien hay que tener en cuenta que "el nivel vírico" en los niños "es menor que en los adultos" y que su capacidad de contagio es "seis veces menor".
El 68 por ciento de los españoles es favorable a recibir una futura vacuna del Covid-19, la enfermedad que provoca el nuevo coronavirus, según la encuesta de percepción social sobre aspectos científicos del Covid-19 realizada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, a 2.100 españoles procedentes de distintas comunidades autónomas con el objetivo de analizar el cumplimiento de las medidas de prevención y sus actitudes ante una futura vacuna.
En concreto, un 32 por ciento de los encuestados se muestra totalmente favorable a recibirla, el 36 por ciento estaría en una posición favorable, aunque con algunas reticencias, y el 23 por ciento muestra un nivel de reserva alto. El 9 por ciento restante prefiere no responder.
Según la encuesta, las personas mayores tienen mayor predisposición a vacunarse por Covid-19 que las más jóvenes, pero los análisis muestran que son más determinantes otros factores sociodemográficos. En concreto, presentan mayores niveles de reticencia a la vacunación aquellas personas que trabajan por cuenta propia (autónomos), las que tienen niveles altos de estudios (particularmente primer ciclo universitario) y de ingresos así como las que consideran que tienen un buen estado de salud.
Asimismo, el estudio pone de manifiesto que un 32 por ciento de la población se muestra reticente a recibir vacunas contra el Covid-19 por reticencias relacionadas con la rapidez de la investigación y no desean ser los primeros en vacunarse, mientras que un 12,7 por ciento manifiesta temer efectos negativos para su salud.
Sin embargo, la confianza en las vacunas en general sigue siendo alta entre la población española, en línea con estudios previos a la pandemia: la gran mayoría de los españoles considera que las vacunas son eficaces para prevenir enfermedades (tan solo un 4,4% se muestra en desacuerdo) y que son seguras (6% en desacuerdo).
El cumplimiento de las medidas de prevención es un predictor de actitudes favorables a la vacunación contra el Covid-19. Además, las medidas han sido adoptadas por una amplia mayoría la población: 8 de cada 10 manifiesta tener un seguimiento riguroso de las tres medidas de prevención del coronavirus: mascarilla, distancia social y lavado de manos. Sin embargo, cerca de uno de cada diez españoles incumple ocasionalmente alguna de las tres medidas y un 10 por ciento adicional manifiesta tener un seguimiento bajo en el conjunto de las tres.
Del mismo modo, el estudio ha mostrado que el contexto social más cercano (familiares y amigos) influye fuertemente en el cumplimiento de las medidas de prevención del coronavirus, señalando así que el cambio de hábitos es en gran medida grupal, más que individual. Además, el trabajo ha puesto de manifiesto que existe una fuerte asociación entre los tres principales comportamientos recomendados para la prevención de la Covid-19 (distancia social, higiene de manos y uso de la mascarilla) ya que los niveles de seguimiento en una de las recomendaciones, con una alta probabilidad, se observan en las otras dos.
Las personas que tiene una enfermedad crónica o no gozan de una buena salud tienden a adoptar en mayor medida los cambios de hábito que ayudan a prevenir la Covid-19. Asimismo, los padres y madres de menores de edad presentan una mayor práctica de las medidas de prevención del coronavirus.
El estudio muestra que la edad no es un factor determinante en el seguimiento de las medidas de prevención. Por otro lado, se observa que la percepción de efectividad de las medidas de prevención, así como la preocupación por la evolución de la pandemia están relacionadas con un mayor cumplimiento de las mismas.