La Guardia Civil de Utrera desalojó el pasado sábado un chalé donde se encontraban varios adultos y algunos niños celebrando una fiesta rociera. Fueron precisamente los vecinos los que alertaron de la celebración, ilegal, desde la puesta en marcha del estado de alarma
Varios vecinos habían alertado a los agentes de la existencia de dicha celebración ilegal, según el real decreto de alarma.
Según la información adelantada por El Correo, los agentes se desplazaron a un chalé de una urbanización de la localidad, donde fueron recibidos por el propietario del inmueble que aseguró que todos los presentes eran miembros de la Hermandad Rociera de Utrera y que estaban llevando a cabo “una reunión para poder sobrellevar el periodo de confinamiento”.
Ante dicha manifestación, los agentes informaron de la prohibición existente y del quebrantamiento que estaban realizando del estado de alarma por el coronavirus, desalojaron el inmueble e informaron de la denuncia por dichos hechos.
Los agentes identificaron a ocho adultos a los que comunicaron que serán sancionados por violación del estado alarma con una multa de entre 601 y 30.000 euros. A la hora de determinar la cuantía será determinante el agravante de la presencia de menores en este claro caso de incumplimiento del estado de alarma.