El obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, ha sido multado este jueves por la Guardia Municipal donostiarra al circular en su coche con otra persona en el asiento del copiloto. Esto no está permitido en el actual estado de alarma por la pandemia del coronavirus.
Los hechos sucedieron a media mañana de este jueves en uno de los controles rutinarios que realiza la policía local en la ciudad, según confirmaron fuentes de la Guardia Municipal. Los agentes pararon a un vehículo en el que circulaban dos personas y cuyo conductor era el prelado donostiarra.
El acompañante de Munilla viajaba en el asiento del copiloto y no en el trasero, como marca el real decreto del Gobierno central, por lo cual se le ha impuesto al Obispo una multa de 600 euros.