El consumidor en la época poscoronavirus tendrá unos hábitos distintos, según el estudio Deconstruyendo al consumidor, elaborado por EY-Parthenon, la división de consultoría estratégica de EY, que revela que la recuperación en el consumo será gradual hasta el final de la crisis sanitaria.
En la etapa de confinamiento, el 46% de los consumidores afirma haber aumentado su gasto en productos de alimentación e higiene, un incremento que se estabilizará en el medio plazo, hasta llegar a los niveles previos a la crisis.
Sin embargo, hay algunas categorías que sufrirán cambios. En concreto, el informe recoge una reducción en la compra de bebidas, principalmente alcohólicas, y un crecimiento en la categoría de frescos, según detalla la consulta efectuada a 2.106 personas mayores de edad, entre el 15 y el 17 de abril.
Por Comunidades Autónomas, los consumidores de Castilla-La Mancha (27%), Comunidad Valenciana (26%) y Galicia y Castilla y León (25%, en ambos casos) son los que manifiestan en mayor proporción un aumento del gasto en la apertura parcial, frente a los de País Vasco con solo un 11%.
Por su parte, el canal 'online' ha crecido durante la etapa de confinamiento, de un 5% a un 12% de los consumidores han pasado a utilizarlo de manera habitual, aunque no ha conseguido fidelizarlos y la previsión es que volverá a tener un peso similar al que tenía antes del comienzo de la crisis.
El incremento más significativo en este canal se ha producido entre los mayores de 60 años, que son el colectivo que renunciará en mayor proporción a este canal una vez acabado el confinamiento.
De las medidas necesarias para seguir empleando el canal 'online' a futuro, tres de cada cuatro consumidores indican que el envío a domicilio en franjas horarias pactadas sería la que tendría mayor impacto, muy por encima de la implantación de sistemas de 'click-and-collect' o 'lockers'.
Además del crecimiento del gasto en alimentación, según el estudio, el confinamiento ha traído un "notable" aumento en las compras de ocio digital y en tecnología, ya que un 40% de los consumidores reconoce que han aumento sus compras en esta categoría.
Así, ocho de cada diez españoles han aumentado sus conocimientos sobre tecnología digital, el uso de las aplicaciones y de las plataformas de entretenimiento durante la reclusión por el estado de alarma.
Los consumidores con edades comprendidas entre 18 y 44 años son los que más han incrementado su gasto durante esta etapa y serán los que mantengan "cierto crecimiento (neto) a futuro".
Las plataformas digitales de entretenimiento online "han convencido", revela la consulta, que precisa que uno de cada cuatro entrevistados se ha suscrito a alguna plataforma digital en las últimas semanas y el 80 % mantendrá su suscripción (o incluso la ampliará).
Asimismo, el 80 % de los consumidores manifiesta su satisfacción con su operador de telefonía móvil.
Por regiones, Castilla La Mancha (48%) y Comunidad Valenciana (46%) se sitúan muy por encima de la media frente a Cataluña (39%) y Madrid (32%).
Los productos de ropa y complementos han sido una de las categorías que más han sufrido en la etapa de confinamiento, con un 33% de los consumidores que declara no haber comprado y un 44% que reconoce que su gasto ha sido menor o mucho menor.
Uno de cada dos consumidores prevé recuperar su gasto habitual en ropa, mientras que un 16% afirma que será mayor tras la apertura parcial.
Por comunidad autónomas, durante la apertura parcial, los consumidores de Castilla La Mancha (23%) y Galicia (20%), son los que más apuestan por aumentar ese gasto, frente a los de Madrid (13%) y País Vasco (15%) y Castilla y León (15%).
En la fase de recuperación, Castilla La Mancha (32%) repite en la primera posición, seguida de Andalucía (27%) frente a País Vasco (20%) y Madrid (18%) que cierren la tabla.
Según el informe, uno de los principales retos para el sector es cómo recuperar la afluencia de clientes a sus tiendas físicas y mantener la operativa diaria con las nuevas normas sanitarias.
En este sentido, más del 90% de los consumidores considera necesario o importante la limitación del aforo, el uso de desinfectantes para la ropa o la certificación de la higiene de los probadores.
En cuanto a la compra 'online', que ya tenía una penetración relevante antes de la crisis (más de un 40% de los consumidores la había empleado alguna vez), el impacto a medio-largo plazo no parece muy grande, dado que dos tercios de los encuestados indican que volverán a utilizar este canal de una manera similar a la que lo hacían antes de la crisis.
Poniendo un mayor énfasis, eso sí, en la disponibilidad de mecanismos de 'click-and-collect', y con una valoración moderada (solo un 50% lo considera interesante) de un servicio de asesoramiento por videoconferencia.
El crecimiento en las ventas de productos de alimentación, higiene y el descenso en los de ropa y complementos son la cara y la cruz del consumo en la crisis del Covid-19, según el estudio, que revela que, en este contexto, la mayoría de los consumidores españoles estarían dispuestos a pagar más por marcas del país o que certifiquen una producción nacional.
En concreto, el 63% de los consumidores españoles pagaría un extra por productos nacionales.