De Canadá nos llega una historia sorprendente. En medio de un partido de hockey, una joven detectó un lunar sospechoso, a lo lejos, a un miembro del equipo. No paró hasta dar la voz de alarma. Lo que ella no sabía es que iba a ayudar a salvar la vida de ese hombre.
Nadia Popovici veía el partido de los Canucks tranquilamente desde la grada cuando observó en el cuello de un miembro del equipo técnico algo que no le gustó.
Nadia es estudiante de medicina, así que no se lo pensó dos veces y comenzó a hacer señas desde la primera fila para captar la atención de Brian Hamilton.
Cuando por fin lo logró, le mostró el mensaje que había escrito en su móvil: “Perdona, pero puede que el lunar que tienes en el cuello sea cancerígeno. ¡Por favor, ve al doctor!”.
El hombre lo vio pero no le dijo nada a la joven, así que todo pareció quedar ahí.
Sin embargo, cuando el hombre acudió a una revisión para quedarse tranquilo pudo confirmar lo que Nadia le había dicho. Efectivamente era un melanoma maligno que debía ser extirpado de inmediato.
Tan pronto como se sometió a la operación y se recuperó, el equipo de hockey canadiense inició una campaña en redes para encontrar a Nadia Popovici. Ahora, casi tres meses después, ambos se han dado un emotivo abrazo con que Brian le agradece que le haya salvado la vida.
Por si fuera poco, el equipo de hockey le ha regalado a la estudiante de medicina una beca de 10.000 dólares. Es el gesto del equipo para premiar la certera vista de la joven.