Los jóvenes de 12 a 19 años en Galicia suponen ya la franja de edad con la mayor tasa de covid , según los últimos datos del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias. Por cada gallego de 40 a 49 años con coronavirus, hay cuatro adolescentes contagiados. Es la primera vez en la que superan al resto en tasa de infección desde que empezó el verano y la quinta ola.
Los adolescentes presentan una tasa de 1.396 casos positivos por cada 100.000, según los últimos datos. Les siguen de cerca los veinteañeros (1.391), quienes habían sido los que registraban la mayor incidencia a lo largo del verano.
Después de ellos, la mayor tasa de incidencia la tienen los niños, con casi 600 casos por 100.000 habitantes. Mientras en los adolescentes y jóvenes lleva bajando varias semanas, en la franja de cero a once años la incidencia ha tenido altibajos. La incidencia acumulada a 14 días rondaba los 455 casos a finales de julio, y a principios de agosto subió a 667. Esta semana se registraban 598, según los datos del pasado jueves.
Según apunta Faro de Vigo, esta evolución va en consonancia con una investigación de la Universidad de Pensilvania publicada esta semana en 'Science Advances' donde varios investigadores apuntan que el coronavirus acabará posiblemente siendo una enfermedad endémica de los niños mientras no estén vacunados.
En este estudio, los autores presentan un modelo para predecir la circulación del SARS-CoV-2 a corto o medio plazo, unos cinco años, mostrando su transición de emergencia pandémica a virus endémico, aquel que tiene constante presencia y habitual prevalencia en una población de una área geográfica.
"Nuestro modelo sugiere que el riesgo de infección se trasladará probablemente a los niños más pequeños a medida que se incremente la inmunidad en la población mediante las vacunas o a través de la exposición al virus", explicó Ottar Bjornstad, investigador, en un comunicado.
Los investigadores recuerdan que los coronavirus, en general, tienen una exposición previa que puede conferir inmunidad a corto plazo con recaídas. Lo bueno es que estas exposiciones van facilitando protección contra la enfermedad severa en el sistema inmunitario.
De este modo, si la protección de las vacunas es breve, de tres meses a un año, la inmunidad será a corto plazo y habrá brotes de covid recurrentes debido a las reinfecciones. No obstante, esto irá preparando el sistema inmune para protegerlo frente a cuadros graves de la enfermedad. Si la inmunidad es a largo plazo, 10 años o permanente, serán los jóvenes los que presentarán las tasas más altas de infección, ya que los mayores estarán más protegidos por infecciones previas.