Desde este martes 2 de diciembre, Galicia comienza a realizar cribados para detectar cardiopatías congénitas críticas en "todos" los bebés nacidos en el Servizo Galego de Saúde (Sergas). La Administración autonómica invertirá más de 72.000 euros en adquirir el material necesario.

Las pruebas para detectar estas patologías, que causan el 20 por ciento de los fallecimientos durante el primer mes de vida, se realizarán en las primeras 24 horas tras el nacimiento.

Se harán a "todos" los bebés nacidos en el Sergas. "E instaremos también a que se haga en la privada", ha añadido el presidente de la Xunta, tras la reunión semanal de su gabinete en la que se ha evaluado un informe sobre este nuevo cribado.

Las cardiopatías congénitas críticas afectan a dos de cada 1.000 nacimientos y "pueden comprometer gravemente la salud del bebé", tal y como ha explicado el presidente.

Alfonso Rueda ha aprovechado para reivindicar que Galicia cuenta con una cartera de 37 cribados neonatales, "por encima" de los marcados como obligatorios en el Sistema Nacional de Salud.

Por otra parte, el Gobierno gallego ha aprobado este lunes contratar, por casi 4,9 millones de euros, el suministro sucesivo de material y la puesta a disposición de los equipos necesarios para el tratamiento de heridas por sistemas de terapia de presión negativa, que facilitan la cicatrización.

Será una contratación centralizada --es decir, para las siete áreas sanitarias-- para el período 2025-2028. Con todo, está contemplada una prórroga por dos años más, en cuyo casi el valor estimado superaría los 8,1 millones.

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