Rumiación y pastillas: la salud mental, un asunto pendiente de la Sanidad en España
Los trastornos mentales, ansiedad y depresión, son la segunda causa más habitual de baja laboral en España
Los pensamientos suicidas son más habituales en mujeres, mientras que las adicciones y trastornos del comportamientos afectan mayoritariamente a hombres
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La salud mental es uno de los retos que enfrentamos en sociedades marcadas por un ritmo frenético que nos lleva a sufrir ansiedad, depresión y otros trastornos psicológicos. Darle vueltas a los problemas en nuestra cabeza durante el día o peor, cuando nos vamos a la cama, se llama rumiación y según un estudio es la causa del 40% de los problemas de ansiedad. Muchos echan mano a las pastillas en vez de acudir a un especialista por miedo al tabú.
Los problemas que rumiamos constantemente y terminan por convertirse en pensamientos obsesivos pueden derivar en una enfermedad mental. Muchas veces en vez de buscar ayuda con un especialista recurrimos a las pastillas, una solución inmediata que no resuelve el problema de fondo.
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Detrás del 40% de los problemas de ansiedad y del 30 de los casos de depresión está la rumiación, según un estudio que analiza "las estrategias silenciosas que nos acercan o apartan del bienestar emocional' realizado por Línea Directa en España.
Los datos de los 1.400 voluntarios que han participado en el estudio revelan que el 40 % de los españoles afirma haber atravesado problemas de salud mental, siendo las mujeres, de entre 18 a 29 años, las más afectadas. Además, "la ansiedad (68%) y la depresión (29%) son los problemas más acentuados", ha destacado la psicóloga y experta en inteligencia emocional, Ruth Castillo Gualda, durante la presentación del estudio.
La especialista, sin embargo, considera que son más los casos que lo que revela el estudio, porque "el 70 % de la sociedad española sigue pensando que contar cómo nos sentimos o decir que estás atravesando por un problema de salud mental es un tabú".
Esto lleva a que miles de personas que necesitarían ayuda especializada en salud mental busquen alivio a sus síntomas por su cuenta o recurran a las pastillas: 14 millones de españoles se han enfrentado a esos problemas con medicación pero existen estrategias para identificar y aprender a gestionar las emociones.
España encabeza la lista de consumo de psicofármacos, en concreto de benzoalcohólicos. El 60 % de los encuestados en el estudio afirmó que había tomado medicamentos para dormir alguna vez, el 41% había tomado medicamentos para dejar de estar triste o antidepresivos. ¡Hay una incesante sobremedicación!", ha explicado el psicólogo especialista en Intervención de la Ansiedad y el Estrés, Juan Ramos-Cejudo.
El estudio aborda la problemática que conlleva no saber gestionar las emociones al no contar con las estrategias adecuadas para manejar los sentimientos. En este aspecto, esta situación ha provocado una subida en la venta de ansiolíticos y antidepresivos en las farmacias del 40 por ciento en la última década y España está a la cabeza de Europa. Además, los trastornos mentales son la segunda causa más habitual de baja laboral.
Ante una enfermedad mental hay que pedir ayuda: no quedar atrapado en pensamientos negativos
La experta Ruth Castillo Gualda, por su parte, ha destacado que, entre las respuestas a los problemas de bienestar emocional hay algunas que son "poco útiles" y que, lejos de solucionar el problema, lo pueden agravar llevando a problemas de ansiedad y depresión. Estas serían: reprimir lo que se siente, rumiar la situación o el problema y desconocer las causas del malestar emocional.
"Hay personas que piensan que cuando controlamos o suprimimos las emociones las estamos manejando, pero esto no es así, igual que cuando nos quedamos atrapados en los pensamientos negativos esto en vez de ocuparnos del problema incrementa nuestro malestar emocional", ha explicado la psicóloga.
No obstante, ha señalado que hay otras estrategias que "cuestan un poco más pero que sí acercan al bienestar emocional y están a la base de una mejor salud mental". Entre estas estrategias se encuentran: la identificación y la comprensión emocional, es decir, "reconocer las señales y entender por qué está pasando ese sentimiento", y, por último, "saber tomar distancia y reformular las situaciones y ser conscientes de que no hay una verdad universal a la hora de interpretar una situación".
Por otro lado, la especialista ha indicado que, para mejorar la satisfacción y evitar así problemas de salud mental es bueno llevar a cabo prácticas como: ser conscientes del ego personal, no dejarse arrastrar por los mitos o creencias, buscar las causas que generan malestar y no juzgarse ni culparse continuamente; atender y afrontar aquello que sí es importante; y reevaluar, reformular y tomar distancia de las situaciones difíciles.
El análisis muestra una diferencia entre los trastornos de salud mental de las mujeres y los de los hombres, ya que, tal y como ha explicado Ramos-Cejudo, "es diferente cómo los gestionan puesto que los hombres reprimen más las emociones o tienden a un mayor consumo de sustancias y piden menos ayuda en general y las mujeres presentan peores índices de calidad del sueño y mayor disposición a la inestabilidad emocional".
En este sentido, se pone de manifiesto que "la salud mental tiene género" y debe tratarse de manera diferente ya que problemas como la ansiedad, los pensamientos suicidas o los TCA son más comunes en las mujeres, y, problemas como las adicciones, los trastornos del comportamiento y la bipolaridad, en los hombres.
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