El 14 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, una enfermedad que afecta al 20% de la población infantil. Por eso, la Asociación de Afectados por la Dermatitis Atópica quiere concienciar sobre una enfermedad a través de una campaña con la que enseña su forma más grave.
Esta afección incapacita e impacta de forma brutal en los pacientes. El objetivo es seguir impulsando la investigación para que salgan nuevos tratamientos que puedan mejorar la calidad de vida de estas personas.
Janaina Sánchez es una paciente con Dermatitis Atópica desde que era pequeña, pero eso no le impedía disfrutar de su pasión, la montaña y el deporte, hasta que hace tres años le dio un brote que no ha remitido desde entonces. "Cualquier cosa cotidiana te cuesta un mundo hacerla, porque no paras de rascarla porque genera una ansiedad brutal y un desgaste físico y emocional brutal", según nos cuenta.
El picor es tan fuerte que incapacita, "yo he tenido miedo de volverme loca, pero loca de verdad. Yo he llegado a sentir que había un montón de hormigas corriendo por mi cuerpo". Sandra Ros, Psicóloga del Servicio de Dermatología del Hospital Sant Pau de Barcelona asegura que el 40% de sus pacientes sufre ansiedad o depresión.
Janaina ha ido varias veces a terapia y toma antidepresivos. El 66% de los pacientes refiere baja autoestima y tienen que lidiar con una sociedad que, en general, banaliza la enfermedad. El apoyo de los más cercanos y la terapia psicológica es fundamental. Los fármacos biológicos y las terapias avanzadas han cambiado de una forma radical la calidad de vida de los pacientes."