La Atención Primaria está en crisis. Los médicos no quieren una especialidad mal pagada y repleta de horas y sinsabores. No quieren atender a los pacientes como números, ni tampoco vivir un calvario escasamente lucrativo, De ahí, que las plazas de esta especialidad no sean las más deseadas y queden vacantes. El shock de la pandemia, y el estrés postraumático que ha provocado tampoco ayudan, Y los datos se resienten, entre ellos la espera para las citas y las llamadas interminables que todos hemos sufrido. Las huelgas han sido una constante en los últimos meses. La OCU pone datos a esta realidad.
Nada menos que 4,9 días hábiles es el tiempo medio que hay que esperar para obtener una cita presencial con el médico de familia (4,8 días para una cita telefónica) utilizando la web del Servicio de Salud de cada comunidad autónoma o la correspondiente app para el móvil, un plazo muy superior a las 48 horas de espera máxima que las propias comunidades autónomas y el Ministerio fijaron hace cuatro años en el Marco Estratégico para la Atención Primaria. De hecho, solo el 32% de estas citas cumple actualmente dicho compromiso. Son datos de una encuesta realizada entre el 15 de marzo y el 2 de abril por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) a 2.261 personas y que revelan las dificultades de los españoles para acceder al servicio más básico de la sanidad pública.
Considerando sólo los días hábiles (en los que el Centro de Salud está abierto), y contando a partir del día siguiente del que se pide una cita presencial con el médico de familia, las comunidades autónomas con mayor tiempo de espera media son Cataluña y Madrid, con 6,9 y 5,7 días respectivamente. Frente a ellas, comunidades con plazos muy inferiores, como la Región de Murcia, donde la espera media es de 2,9 días; y Castilla y León, donde alcanza los 3 días. Por su parte, las citas para una consulta telefónica reúnen plazos en general muy similares, a veces incluso superiores: en Aragón, por ejemplo, la espera media es de 7,5 días.
La encuesta de OCU recoge también datos sobre los tiempos medios de espera para una consulta con el pediatra, donde también se supera el objetivo de dos días de espera media, aunque en menor medida: 2,9 días hábiles si es una consulta presencial y 2,7 días hábiles si es telefónica. También hay datos sobre las esperas para una consulta de enfermería, en este caso al menos aceptables para la mayoría de las comunidades autónomas. Y es que para este servicio el plazo medio para una atención presencial se sitúa en torno a los 2 días hábiles, salvo en Cataluña donde alcanza 3,9 días de media, tal y como se detalla en la revista OCU Salud de junio.
OCU denuncia que, según los datos de la encuesta, apenas el 32% de las citas presenciales con el médico de familia cumple el compromiso de atención no urgente en menos de 48 horas que acordaron las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad en el Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitario, publicado en el BOE hace 4 años. Y la situación no es mejor en atención especializada: según datos de oficiales de finales de 2022, la espera media para la primera consulta con el especialista es de 95 días (16 días más que en junio de 2022); y de 120 días para una intervención quirúrgica (7 días más que en junio de 2022).
OCU lanza la campaña Más calidad, menos esperas para exigir cita en menos de 48 horas en Atención Primaria, tal y como acordaron los propios servicios públicos de salud. Pero también para que la atención del médico de familia comprenda un tiempo mínimo de 10 minutos por paciente, una reivindicación histórica de la organización y las asociaciones profesionales sanitarias. Unos plazos que, además, deberían de poder consultarse de forma pública. OCU considera que ha llegado la hora de empezar a reforzar las plantillas, liberarlas de cargas burocráticas y prestigiar de nuevo la especialidad de médico de familia, el servicio más básico de la sanidad pública.