Aisha nació el pasado marzo con graves dificultades para respirar que comprometían su vida, así que en las primeras 12 horas de vida fue trasladada en ambulancia desde Tarragona hasta el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona conectada a una máquina que sustituye la función de los pulmones.
La pequeña ya ha sido dado de alta de la UCI y este viernes ha estado presente en brazos de su madre, Radya Bakkari, en la rueda de prensa en el Departamento de Salud para presentar su caso, el de la bebé más pequeña que se ha trasladado conectada a esta máquina, el ECMO (siglas en inglés del oxigenación por membrana extracorpórea). "Gracias a los doctores y a las enfermeras, ahora puedo tener a mi hija aquí en mis brazos, sino ella no estaría aquí", ha expresado visiblemente emocionada la madre, sosteniendo a Aisha.
El milagro recuerda el impresionante dispositivo médico en Madrid que salvaba también la vida a una bebé de tres meses. La niña, que ahora se recupera lentamente en el Hospital Universitario 12 de Octubre, ha estado conectada a una ECMO, una máquina que hacía las funciones de su corazón y pulmones, afectados por una infección respiratoria casi mortal.
La pequeña nació a principios de marzo en el Hospital Verge de la Cinta de Tortosa (Tarragona) e inmediatamente fue derivada al Hospital Joan XXIII de Tarragona por un síndrome de aspiración meconial, que se produce cuando una infección o concentraciones bajas de oxígeno obliga al feto a tomar bocanadas de aire, de manera que inhala el líquido amniótico que contiene meconio (las primeras heces) y éste se deposita en los pulmones.
"Es un líquido muy inflamatorio que provoca insuficiencia respiratoria y que es una de las complicaciones más grave que puede tener un recién nacido a término", ha explicado la jefa de sección de críticos pediátricos y neonatales del Joan XXIII, Mar Albújar.
Pasadas las primeras horas y viendo que Aisha no mejoraba a nivel respiratorio, los especialistas del Joan XXIII contactaron con Vall d'Hebron y acordaron que requería ser conectada al ECMO.
En la madrugada del pasado 5 de marzo, un equipo formado por 12 profesionales del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y de los hospitales Vall d'Hebron y Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat (Barcelona), se desplazó hasta el Joan XXIII de Tarragona para iniciar la terapia con ECMO y trasladar a la pequeña conectada hasta Barcelona. El ECMO, que extrae la sangre del cuerpo del paciente y la oxigena antes de volverla a introducir, sustituye las funciones de los pulmones o del corazón para que estos órganos puedan descansar y darles así la oportunidad de recuperarse. Así, la máquina "permite que los pacientes vivan sin respirar", ha explicado el director del ECMO pediátrico y neonatal de Vall d'Hebron, Joan Balcells.
El ECMO se usa dentro de unos pocos hospitales altamente especializados, tanto en menores como en adultos, pero no es tan frecuente que se instale en una ambulancia del SEM y se traslade a un enfermo conectado a ella.
Aisha es la bebé más pequeña en la que se ha llevado a cabo un traslado en ambulancia con ECMO, máquina a la que estuvo conectada en Vall d'Hebron durante casi diez días, hasta que sus pulmones pudieron volver a funcionar de forma autónoma; después de dos meses del ingreso, la bebé fue dada de alta.
Si bien el SEM Pediátrico de Cataluña ha llevado a doce traslados con ECMO de menores en la última década, parte de ellos desde otras comunidades autónomas, el conseller de Salud, Manel Balcells, ha indicado que ahora se ha dado un paso más para "consolidar" este programa.
En este sentido, a partir del 1 de junio se inicia un sistema "estable", entre el SEM, los hospitales y el Departamento de Salud, en el que todo el procedimiento está "protocolizado" para activar la asistencia de traslado con ECMO pediátrico, las 24 horas del día y desde cualquier rincón de Cataluña, sin perjuicio de seguir dando servicio a otras partes de España. De esta manera, se garantiza "la equidad territorial", mediante un sistema "pionero en el Estado", ha resaltado el conseller.
El desarrollo de esta técnica para salvar vidas avanza en España. Los profesionales de la Unidad de Medicina Intensiva del Hospital Universitario Materno Infantil de Canarias, adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, han realizado el primer traslado entre islas de un paciente pediátrico en estado crítico que precisaba oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO) tras un atropello que le había dejado en estado crítico.
Los profesionales del Hospital Universitario Ntra. Sra. de La Candelaria solicitaron la intervención del equipo ECMO del Hospital Universitario Materno Infantil de Gran Canaria, tras la realización de dos intervenciones urgentes de embolización hepática y hepatectomía segmentaria a una paciente de dos años a la que lograron estabilizar tras sufrir un atropello. Si bien, ante la gravedad de su estado y la situación de fallo respiratorio por contusión pulmonar grave, tras intentar el manejo de la contusión a través de técnicas de ventilación mecánica sin éxito, los profesionales de la UCI Pediátrica consideraron que precisaba la técnica ECMO, como terapia de soporte.
Se trataba de una asistencia urgente en la que había que sustituir las funciones de los pulmones hasta que el daño o fracaso de éstos se halla recuperado. Actualmente, la niña tras más de una semana de ingreso hospitalario en la Unidad de Medicina Intensiva Pediátrica del Materno Insular de Gran Canaria continúa recuperándose de las lesiones sufridas. Primer traslado ECMO pediátrico entre islas Se trata de la primera vez que se realiza una canulación y traslado de paciente pediátrico en ECMO, desde un hospital emisor dentro de la propia Comunidad Autónoma.