No cabe duda de que la salud dental es importante para el bienestar de una persona. Esta se consigue con una correcta higiene y con una dieta adecuada que ayude a tener una dentadura en perfectas condiciones. Por ello, conviene conocer qué alimentos perjudican más a los dientes.
Desde la niñez, nuestros padres nos alertan del peligro que supone excederse con los dulces, ya que un excesivo consumo de alimentos azucarados será el causante de la aparición de caries. Así pues, si deseamos mantener la salud de nuestros dientes es recomendable reducir la ingesta de:
Dulces y caramelos. No solo contienen grandes cantidades de azúcar, sino que este se adhiere a los dientes, provocando un sobrecrecimiento bacteriano que ayudará a la aparición de las citadas caries.
Refrescos carbonatados. Las bebidas carbonatadas que contienen azúcar suponen un doble riesgo para la dentadura, ya que le suman el ácido carbónico, capaz de corroer el esmalte dental.
Alimentos que tiñen los dientes
El azúcar no es el único enemigo de la salud dental. Hay otros muchos alimentos que perjudican a los dientes de un modo u otro. Los siguientes, por ejemplo, afectan al color del esmalte:
Café y té. Aunque el consumo de estas bebidas es muy habitual, ambas contienen sustancias que manchan los dientes. Además, el café también es ácido, una característica que tampoco les viene bien.
Salsas de tipo industrial. En este caso hablamos del ketchup, del vinagre balsámico o de la salsa de soja, ya que todos ellos incorporan aditivos que tiñen la dentadura.
Vino tinto. Más allá de que el alcohol causa sequedad en la boca –provocando la formación de caries e incluso la inflamación de las encías–, el vino es ácido y además puede pigmentar el esmalte dental.
Como acabamos de apuntar con el café y el vino, una excesiva acidez incidirá en los dientes de manera negativa. Esto provoca que haya que tomar precauciones cuando se toman los siguientes alimentos:
Cítricos. La naranja, el pomelo o el limón son esenciales en la dieta mediterránea, ya que aportan una gran cantidad de vitaminas. Sin embargo, su acidez puede afectar a la dentadura. Por esa razón, cada vez que se ingieren –generalmente en forma de zumo–, conviene cepillarse los dientes para eliminar los restos que queden.
Frutos secos y otros aperitivos
En esta lista de qué alimentos perjudican más a los dientes también hay que mencionar a los frutos secos y a los aperitivos salados.
Frutos secos. Por un lado hay que mencionar aquellos que destacan por su dureza, como el maíz frito (lo famosos quicos), dado que obligan a los dientes a hacer un sobreesfuerzo para triturarlos. Y por otro, hemos de apuntar los frutos secos pegajosos como las pasas o los dátiles. Al adherirse a los dientes también lo hace el azúcar que contienen, lo que puede provocar las consabidas caries.
Aperitivos salados. Las patatas fritas y otros aperitivos similares contienen almidón, sustancia que es muy agresiva con el esmalte. Además, sus niveles de sodio son altos, lo que contribuye a la sequedad y deshidratación de la boca.
Ni frío ni calor
Finalmente, los cambios de temperatura extremos de los alimentos también influyen negativamente en nuestra salud dental. Así pues, hay que tener cuidado y no exponer el esmalte con hábitos como morder hielo.