Halloween es una de las festividades más esperadas por muchos jóvenes y adolescentes, donde los disfraces, las decoraciones extravagantes y la diversión son los protagonistas, sin embargo también implica riesgos dado el uso de velas, adornos inflamables y lugares llenos de gente donde es necesario tomar precauciones para evitar posibles accidentes.

En casa, al usar elementos decorativos que requieran llamas, como velas, se recomienda optar por alternativas más seguras, como velas a pilas, luces LED o barras luminosas, que reducen el riesgo de incendios. En caso de elegir velas tradicionales, estas deben colocarse sobre un soporte resistente al fuego y en una superficie estable, a más de un metro de distancia de materiales combustibles, y fuera del alcance de niños y mascotas. También es importante apagar todas las velas antes de dormir, o al salir de la habitación, y evitar el uso de elementos pirotécnicos como bengalas.

Para la decoración, es recomendable utilizar materiales ignífugos en lugar de inflamables, especialmente en adornos como telarañas de algodón o flores secas, que deben mantenerse lejos de fuentes de calor y sin obstruir los detectores de humo ni rociadores automáticos. Estos detectores y sistemas de alarma son esenciales para prevenir y actuar rápidamente ante cualquier emergencia.

En cuanto a los disfraces, es crucial prestar atención al etiquetado y verificar que tengan el marcado CE, que asegura que cumplen con los estándares de seguridad en la Unión Europea. Se desaconsejan disfraces con pelucas, máscaras o complementos que puedan prenderse fuego con facilidad, así como prendas de fibras sueltas y ligeras, como la seda, que son altamente inflamables. Se recomienda optar por telas más seguras, como la lana o aquellas tratadas con retardantes de fuego.

 En caso de que una prenda se incendie, es importante no correr, ya que el viento avivaría las llamas. La mejor reacción es tirarse al suelo, cubrirse la cara, girar lentamente el cuerpo y usar una manta o prenda para sofocar el fuego.

Para quienes decidan celebrar en locales de ocio, la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 (ASEM112) ha publicado una guía de buenas prácticas junto con el Cuerpo de Bomberos de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid, disponible aquí. Según esta guía, los locales deben tener salidas de emergencia claramente señalizadas, sin obstáculos y fáciles de abrir para una evacuación rápida. La decoración debe permitir que las señales de emergencia sean visibles y los extintores deben estar siempre accesibles.

Además, la guía insiste en evitar sobrecargar los enchufes eléctricos, ya que una conexión inadecuada podría causar cortocircuitos. La instalación de detectores de humo en los locales de ocio es otro aspecto clave, dado que estos dispositivos, de bajo costo, emiten una alarma sonora en caso de incendio, permitiendo actuar a tiempo y evacuar el lugar de manera segura. Y en cualquier emergencia, siempre debe contactarse con el 112, el teléfono de emergencias en Madrid.

Estas recomendaciones son sencillas, pero fundamentales para disfrutar de un Halloween seguro, minimizando riesgos en casa y en lugares públicos.

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