Mataelpino se une para que no despidan a Moisés, el conserje que hace sonreír a los niños del pueblo

Moisés es una de esas personas que viven para hacer felices a los demás, especialmente a los más pequeños. Su presencia en el colegio Josefina Carabias de la sierra madrileña, en Mataelpino, se ha vuelto esencial, pero se acerca el fin de su contrato y decenas de familias claman al ayuntamiento para que continúe sacando la sonrisa de sus hijas e hijos.

Cada mañana Moisés se aposta a la entrada del cole con su marioneta en mano y saluda uno a uno a los alumnos que van trasformado sus caras de sueño o de enfado por muecas de alegría, incluso de aquellos más tímidos.

Inés Calzada, la madre de Samuel, confiesa las dificultades que tuvo su hijo para entrar al colegio cuando todavía no había cumplido los tres años: “Para mí era horrible, todos lo padres que tenemos niños que vienen llorando al cole saben lo que es. Entonces llegaba Moisés con una jirafa de peluche detrás de la cabeza y Samuel se partía de risa, se le olvidaba y entraba”.

Como el caso de Inés, son muchos los padres y madres a los que la actitud de Moisés con sus hijos les ha llegado muy adentro. Begoña González cuenta emocionada cómo su hija le habla del ahora conserje: “Mamá, es que siempre se agacha para hablar con nosotros”

“Para nosotros Moisés es un pilar fundamental en nuestro colegio, me parece una joya en bruto que no podemos perder y por eso esta lucha tenemos que llegar hasta el final. Mis hijas vienen felices y las familias. Qué gusto da que, aunque llueva, nieve o haga un calor que no podemos ni aguantarlo, siempre tenga una sonrisa para todos. Luchemos por Moi y que siempre se quede en nuestro cole”, pide Begoña.

Por su parte, Itziar Urbina, madre un alumno, plantea la necesidad del cuidado de la salud mental de los menores: “No se puede hablar del cuidado de la salud mental infantil y dejar que Moisés no continúe con nosotros, y no solo no continúe en el colegio sino acompañando a los más pequeños”

Moisés lleva los últimos tres años trabajado como auxiliar de infantil y conserje, su contrato finaliza el próximo 21 de junio, pero las familias del centro no van a permitir que quien ha tratado a sus pequeños con tanto amor se vaya sin más.

‘Sin Moi perdemos todos’ es el lema bajo el que se organizan para impedir que deje la escuela. Aseguran que lo han intentado por todos los medios, recogida de firmas físicas y a través de la plataforma Change.org, numerosas conversaciones con el Ayuntamiento de Bocema, pero la fecha se acerca y nadie les da una solución.

La petición de la presencia de una figura como Moisés en el colegio no es el mero capricho de unos progenitores, sino que responde a la necesidad de los niños y niñas del centro.

Esther García San Juan, psicóloga especialista en infancia y adolescencia, y madre de un alumno explica esta necesidad: “Desde el punto de vista de la psicología infantil sabemos de la importancia que tiene para el desarrollo saludable de los niños el que puedan establecer vínculos de apego seguros. El colegio, al ser un ámbito donde los niños pasan gran parte del tiempo, supone un lugar donde disponer de figuras de referencia estables y con las que se puedan vincular de una manera segura siendo fundamental para su correcto desarrollo psicológico".

En este sentido, Moisés es una figura de referencia en el colegio de Mataelpino. Debido a llevar varios años trabajando con los alumnos, ha establecido un vínculo de apego importante con estos, ha conectado y se ha convertido en un profesional referente para los alumnos y también para las familias del centro.

Los niños necesitan que existan figuras de referencia estables que les aporten seguridad en el colegio, facilitando el pasaje de lo familiar a lo escolar, haciendo por ejemplo más fáciles las entradas al colegio, entre otras situaciones cotidianas. Para ello, es fundamental, que esta persona sea alguien estable en el tiempo y con la capacidad suficiente para vincularse con los niños. Moisés sería aquella figura de referencia que ha estado a lo largo del tiempo y que ha conseguido vincularse a través del cariño con los niños del colegio.”

Numerosos padres aseguran que el centro cuenta con grandes profesionales que trabajan día a día con gran esfuerzo, pero existe la necesidad de figuras de apoyo que faciliten el trabajo de los docentes, aportando así un entorno propicio para la adaptación y aprendizaje de los más pequeños.

Desde Informativos Telecinco hemos intentado contactar con el concejal de educación del Ayuntamiento de Bocema, Álvaro González Díaz, aunque tras varios intentos no se ha producido respuesta alguna.

Mientras tanto, Moisés ve con tristeza cómo se acerca el final del curso. Tal vez tenga que decir un adiós definitivo a niños, compañeros y familias de Mataelpino, pero todos desean que su marioneta vuelva en septiembre para despertar nuevas sonrisas.  

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