La inesperada erupción el pasado viernes del volcán 'La Soufriere' en San Vicente y Las Granadinas, en el mar Caribe, ha envuelto a gran parte de la isla de una capa de ceniza, acompañada de un intenso olor a azufre, que va a complicar mucho la vida a sus residentes. El volcán soltó una impresionante columna de humo y ceniza que ha provocado la evacuación de miles de personas.
Cerca del volcán, situado en el norte de la isla, las calles y las casas están cubiertas por un grueso manto de ceniza, según ha informado el portal News 784, y el Ministerio de Sanidad del país ha advertido a la población de que tengan precaución porque la ceniza puede irritar los ojos y provocar problemas respiratorios.
Asimismo, la agencia de catástrofes ha indicado que el volcán ha entrado en una fase eruptiva explosiva que puede continuar durante los próximos días y semanas y que se espera que las explosiones sean de una magnitud similar o mayor.
Tras evaluar la espesa ceniza que cubre partes de San Vicente, Bill, miembro del equipo de respuesta a desastres, predice que es posible que las cosas no vuelvan a la normalidad durante "mucho tiempo". "La vida será muy difícil para la gente de este lado del país", asegura.
San Vicente y las Granadinas, donde viven poco más de 100.000 personas, no ha experimentado actividad volcánica desde 1.979, cuando una erupción causó daños por aproximadamente 100 millones de euros. La erupción de La Soufriere en 1.902 mató a más de 1.000 personas.