El presidente de Rusia, Vladimir Putin, podría estarse quedando sin misiles para seguir librando la guerra en Ucrania. Eso unido a que los altos cargos del Ejército de Rusia se culpan mutuamente de que la guerra no haya sido rápida podría hacer que el inquilino del Kremlin se sienta obligado a usar armas nucleares. De hecho, Rusia ha informado de una simulación de lanzamiento de misiles con capacidad nuclear en el enclave occidental de Kaliningrado.
El almirante británico Sir Tony Radakin, jefe del Estado Mayor de la Defensa, dijo en una entrevista con The News Desk de TalkTV que había una "presión increíble" en Rusia para que la campaña obtuviera resultados. La invasión de Ucrania iba a ser una cosa rápida.
Tras 72 días de guerra en Ucrania, Sir Tony Radakin ha señalado que el ritmo al que Rusia lanza misiles, está obligando a Vladimir Putin a una guerra logística para mantenerse abastecido y dejar sin suministros al ejército contrario. "Potencialmente tiene un problema, porque la tasa de gasto y la dureza de la pelea es totalmente diferente a lo calculado”. El almirante británico estima que Rusia tiene el 25% de sus fuerzas eliminadas.
Y el secretario de Defensa de Reino Unido, Ben Wallace, ha dicho durante una visita a Finlandia que los generales rusos fueron chivos expiatorios de la invasión fallida de Putin y ahora se culpan unos a otros por el "desastre". Temen ser purgados si el "pantano" se convierte en una retirada.
La situación es tan complicada para las tropas de Rusia que los generales se está poniendo en la línea del frente en un intento de "resolver este atolladero”. Sin embargo, esto, ha señalado Wallace en The Times, no suele dar "mejor resultado”.
Nadie en el entorno de Putin le ha dicho que se olvide de sus planes en Ucrania, cuentan los expertos. Radakin ha dicho que “esta va a ser una pelea dura, va a seguir siendo una lucha dura, va a ser un trabajo duro”.