“Fue totalmente evitable”. Es la conclusión que señala Robert Ditchey, un veterano piloto de avión, ingeniero aeronáutico y exejecutivo de una aerolínea, sobre el trágico accidente de helicóptero en el que murieron la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, de 41 años, y su hija Gianna, de 13, con otras siete personas.
“Puedo ir tan lejos como para decir que fue irresponsable”, señala Ditchey, que explica que incluso los pilotos más experimentados del mundo pueden tener solamente unos segundos para reaccionar cuando están ‘cegados’ por el clima. Según las investigaciones, el helicóptero de Bryant voló en condiciones climáticas desfavorables como es la niebla, según recoge USA Today.
El helicóptero, modelo Sikorsky S-76, salió de Santa Ana, condado de Orange, al sur de Los Ángeles, poco después de las 9 hora de la mañana del pasado domingo, una hora en las que las condiciones no eran adecuadas para volar, según ha informado el Departamento de Policía de Los Ángeles.
“Era una de las personas más importantes del mundo y ha tenido un final trágico. Es cuando te preguntas, ¿Por qué? ¿Qué demonios pasó? El clima no era bueno para volar ni para la Policía, ¿Por qué lo hizo Kobe?”, comenta Ditchey. Los helicópteros pueden operar con mal tiempo porque pueden volar bajo, pero deben tener una visibilidad razonable de al menos una milla, según los expertos.
Según Ditchey, ir a 120 millas por hora solo le da al piloto 30 segundos para evitar un gran obstáculo, lo que sugiere que el piloto pudo haber estado volando demasiado rápido para maniobrar adecuadamente antes del terrible desenlace. El helicóptero de Bryant parecía tener problemas en el área de Glendale, donde la visibilidad disminuía entonces.
“Un piloto no obtiene autorización general de la FAA para volar en estas condiciones. El piloto es el responsable de determinar si es seguro volar en las condiciones actuales y esperadas”, señaló un funcionario de la Administración Federal de Aviación estadounidense a USA Today.