La resistencia de los Ucranianos se extiende por todo el país para intentar impedir el avance ruso. Lo tienen claro. No se van a rendir. Por eso, las escenas de grupos de civiles desarmados tratando de detener el paso de blindados rusos poniendo sus cuerpos como barrera se repiten en multitud de lugares Tratan de impedir que las tropas de Vladimir Putin sigan avanzando. Lo que sea para tratar de obstaculizar el avance del enemigo con todos los medios a su alcance.
Algunos ciudadanos ucranianos lanzan desde un coche cócteles molotov a un blindado ruso. Siguen las instrucciones del Ministerio de defensa ucraniano. "Destrúyelos con fuego" es el mensaje, junto a gráficos sobre cómo hacer bombas incendiarias y en qué zonas del carro de combate deben impactar.
En la ciudad de Dnipró, la cuarta más poblada de Ucrania, se puede ver a niños ayudando a elaborarlos estas armas de fabricación casera. "Hago mechas para los cócteles molotov", sostiene una niña. En Melitópol, al sudeste, ni los disparos de advertencia, han impedido a varias decenas de vecinos cortar el paso a una columna del ejército ruso. Al grito de invasores y asesinos, han seguido forcejeando cuando un camión de gran tonelaje ha intentado dispersarlos.
Otro grupo, en Kupyansk, situada al noreste de Ucrania, ha corrido hacia un vehículo al ver que llevaba la característica 'Z' del ejército ruso pintada en las ventanas. Con sus propios cuerpos y pese a la desigual fortaleza tratan de impedir la invasión rusa de su país.