Las autoridades de Ucrania han afirmado este miércoles que el Ejército de Rusia ha enviado paracaidistas a la ciudad de Járkov, la segunda más poblada del país, en el marco de un recrudecimiento de su ofensiva contra la localidad, considerada clave para los esfuerzos militares rusos.
"Un grupo de paracaidistas han sido desplegados en Járkov. Los ocupantes han atacado el hospital, la Clínica Médica Militar de la Región Norte", ha dicho el Ejército ucraniano a través de su cuenta en la red social Facebook, antes de agregar que "ha estallado una batalla entre los invasores y los defensores ucranianos".
La llegada de paracaidistas "ha tenido lugar en un momento en el que sonaban las alarmas antiaéreas en Járkov y en toda la región".
A primera hora del día se han registrado además ataques con artillería contra el centro de la ciudad en los que han sido alcanzados la principal comisaría de Járkov y un edificio universitario, sin que por ahora haya informaciones sobre víctimas.
El ataque contra la comisaría ha provocado un incendio que se ha propagado a edificios residenciales colindantes, según ha indicado el Servicio Estatal de Emergencia. "Los equipos de rescate están trabajando en el lugar. Se está determinando el número de víctimas y la destrucción", ha reseñado.
Además de los ataques en Járkov, los esfuerzos bélicos del ejército ruso han llegado a otras ciudades. En Yitomir, una ciudad al oeste de Kiev en la que viven casi 300.000 personas, un misil crucero ha alcanzado otra zona residencial muy cerca de un hospital. Al menos cuatro personas han muerto. Esta misma noche la ciudad de Jersón ha caído en manos del Kremlin, por la que circulan soldados y blindados rusos.
Estos ataques llegan un día después de que las fuerzas rusas atacaran un edificio administrativo en la principal plaza de la ciudad y una torre de comunicaciones. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó tras los ataques que se trataba de "crímenes de guerra" y "terrorismo de Estado".