Una persona ha fallecido este miércoles tras ser atacado por un tiburón blanco de unos cuatro metros de longitud en una playa cercana de Sídney, en el sureste de Australia.
El ataque, que fue grabado en video por algunos testigos, ocurrió cuando el hombre se encontraba nadando a primera hora de la tarde en la playa Little Bay, donde los paramédicos y los agentes encontraron restos humanos flotando en el agua.
El inspector Lucky Phrachanh, del servicio de Ambulancias del estado de Nueva Gales del Sur, afirmó que la víctima sufrió "heridas catastróficas" originadas por el escualo, por lo que nada se pudo hacer por su vida. El aviso inmediato a los servicios de emergencia no ha podido evitar la tragedia.
Un testigo, que se encontraba pescando en unas rocas en las proximidades, explicó a la emisora nacional ABC haber visto cómo un hombre con traje de neopreno era arrastrado hacia el fondo del mar. "Fue algo horrible. Todavía sigo temblando", añadió cuando describió el ataque, que duró varios segundos.
Las autoridades clausuraron la mencionada playa todas las cercanas durante 24 horas, mientras se quedaron patrullando en búsqueda de más tiburones. Están preparando un informe para explicar las circunstancias del incidente, el primer ataque mortal de un tiburón en Sídney desde el año 1963.