La actual ola de coronavirus podría no ser la última en Europa

  • Así lo ha confirmado el consejo científico de Francia

  • El horizonte para el fin de las olas parece claro: la llegada de la vacuna

  • Buena parte de los países de Europa podrían optar por confinamientos

Europa está viviendo los momentos más duros de la segunda ola del coronavirus. Cada vez más países están endureciendo sus medidas de protección e incluso se está volviendo en algunos puntos al confinamiento domiciliario.

Los expertos ya advirtieron de esta segunda ola del virus hace meses, pero parece haberse adelantado a todas las previsiones. Ahora, los científicos son claros: esta podría no ser la última ola en Europa, sino que habría más, como recoge Russia Today.

Así lo ha confirmado el consejo científico de Francia, aunque informa de que todo ello dependería del propio virus, de las medidas tomadas y del grado de cumplimiento por parte de la población. A pesar de ello, todas estas prevenciones podrían no bastar y repetirse "varias oleadas sucesivas" desde el final del invierno hasta la primavera del próximo año. El horizonte de todo ello parece ser claro: la llegada de la vacuna.

Europa se encamina hacia un nuevo confinamiento

Buena parte de los países de Europa podrían optar en breve, o ya han recurrido, a un confinamiento de la población para evitar la creciente ola del coronavirus, pero este criterio y las formas de ponerlo en práctica no son iguales en todos ellos.

Europa ha superado los once millones de casos positivos y los 285.000 fallecidos por covid-19, y así son las restricciones en nuestros países vecinos:

Italia

En Italia hasta el 24 de noviembre, los bares y restaurantes echarán el cierre a las 18.00 horas, así como los teatros, cines, gimnasios y piscinas, en un intento del Gobierno de frenar la curva de contagios para evitar un nuevo confinamiento y salvar el periodo navideño.

Aunque se ha evitado el toque de queda nacional, que ya existe en regiones como Lacio, cuya capital es Roma, Campania, Sicilia, Calabria y Lombardia, se da la potestad a las regiones de cerrar aquellas áreas donde pueda haber aglomeraciones a partir de las 21.00.

Los restaurantes, bares, "pubs", heladerías y pastelerías podrán permanecer abiertos solo de 5.00 a 18.00 horas, pero se les permite abrir domingos y festivos. Por el momento, los restaurantes y bares podrán abrir con estos horarios los domingos y festivos. Se permite solo cuatro personas por mesa si no son del mismo núcleo familiar y la entrega a domicilio hasta 24 horas. También se prevé el cierre de gimnasios, piscinas y balnearios, así como centros culturales, sociales y recreativos y salas de bingo y casinos y parques de atracciones, mientras que quedan abiertos los parques y jardines de juegos para niños.

Alemania

La canciller alemana, Angela Merkel, advirtió ante el número creciente de nuevos contagios diarios con el coronavirus en Alemania que los próximos meses van a ser duros. "Nos esperan meses muy, muy difíciles", advirtió Merkel el domingo por la tarde en una conferencia interna con los jefes del grupo parlamentario conservador de los estados federados, según publica hoy el diario "Bild".

"Así no puede continuar", dijo, y advirtió que cuenta con que los contagios sigan aumentando con fuerza y que al menos hasta febrero habrá que renunciar a eventos de mayores dimensiones también en espacios exteriores. Culpó en gran parte a los viajeros del aumento de contagios al asegurar que "ha pasado por los viajes de vacaciones".

Francia

El número de contagios reales en Francia ronda los 100.000 diarios, prácticamente el doble de los 52.010 que se notificaron este domingo, y que marcaron el cuarto récord consecutivo, según el Consejo Científico que aconseja al Gobierno. Su presidente, Jean-François Delfraissy, dijo: "estamos en una situación muy difícil, incluso crítica" y añadió que esta ola invade a toda Europa", incluyendo "los buenos alumnos" como Alemania o Suiza.

Preguntado sobre la necesidad de recurrir a un confinamiento señaló que hay dos posibles opciones en la actual situación: la primera sería "un toque de queda mucho más masivo" que el que se está aplicando a dos tercios de la población francesa que viven en 54 del centenar de departamentos del país entre las 21.00 y las 6.00 horas. Es decir, un cierre nocturno de más horas y en un área geográfica más amplia.

La segunda opción sería un confinamiento general pero "menos duro" que el que se aplicó en la primera ola entre marzo y mayo que permitiera seguir trabajando, aunque privilegiando el teletrabajo y mantener la actividad escolar. Además, ese confinamiento iría seguido de una desescalada con toque de queda. El Gobierno debe evaluar esta semana el impacto que está teniendo el toque de queda nocturno y ha anticipado que si ajusta el dispositivo será para endurecerlo.

Portugal

Las autoridades portuguesas extreman la atención sobre la presión hospitalaria, que prevén aumentará en estos días, tras registrar durante el fin de semana sus récord de contagios diarios y de hospitalizaciones durante este fin de semana. Los "días complicados" que anticipó el pasado viernes la ministra de Salud, Marta Temido, antecedieron dos jornadas difíciles en el país, que el sábado marcó su récord de contagios en la pandemia con 3.669 contagios en una sola jornada.

Este lunes está marcado además por la norma aprobada en el Parlamento para volver obligatorio el uso de mascarilla en la calle durante al menos tres meses, que fue aprobada el viernes pero aún no ha entrado en vigor, al no ser todavía publicada en el oficial Diário de la República. Algunos expertos lusos se preguntan si se acerca la hora de endurecer de nuevo medidas en Portugal, actualmente en estado de calamidad, con prohibición de reunirse más de cinco personas en la calle o restaurantes.