Una mujer prepara su funeral tras un diagnóstico de cáncer de huesos y se recupera milagrosamente
Fue diagnosticada con un cáncer de hueso raro y agresivo
Llegó a pensar en su funeral y en quién se haría cargo de sus hijos
"Quiero difundir positividad en torno a mi historia" asegura
Stephanie Gillan, una joven de 29 años, ha aprovechado su dura experiencia luchando contra el cáncer para dirigir una organización que apoye la importancia de la salud mental en las personas.
Este madre de tres hijos ha contado su experiencia en la lucha contra esta enfermedad. Stephanie fue diagnosticada en 2017 con un cáncer de hueso raro y agresivo denominado neurofibrosarcoma. Al principio los pronósticos no eran buenos y esta joven, de 25 años en ese momento, llegó a plantearse su funeral y pensó en quién cuidaría de sus hijos si ella no superara la enfermedad.
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Además, al difícil momento por el que pasaba se sumó otro accidente. Su marido Robert fue atropellado por un camión de seis toneladas en el trabajo, como recoge Daily Star.
Tantas complicaciones afectaron de lleno en la salud mental de la pareja, pero afortunadamente, su historia tuvo un final feliz. Su tumor era casi único en el mundo, pero milagrosamente, los médicos pudieron tratarlo y evitaron que continuara deteriorando sus huesos y que produjera metástasis en sus pulmones. Además, su marido, gracias a una milagrosa recuperación, también pudo volver a casa tras el atropello.
Ahora, años después de este duro trance, la joven sigue luchando por destacar la importancia de la salud mental de las personas. Es la directora de la organización benéfica Unmasked Mental Health Scotland y quiere que su experiencia sirva de apoyo para muchas personas que no están pasando por un buen momento en sus vidas.
"Quiero difundir positividad en torno a mi historia y el hecho de que, ante la casi devastación, como familia superamos todos los obstáculos y superamos el año más horrible", asegura. A pesar de que sigue luchando con su tratamiento frente al cáncer y con problemas de salud, defiende que eso nunca acabará con su esperanza y sus ganas de luchar.
Digno de este final de película, a Stephanie todavía le quedaba una sorpresa más: el pasado enero, ganó el concurso de belleza escocés Miss Saltire. Un premio que ha recogido con cariño y ante el que sigue defendiendo la importancia de la positividad y de saber superar las dificultades de la vida.
