El palacio de Buckingham se ha paralizado con "horror y consternación" tras las palabras del príncipe Harry, acusado de "hacer volar a su familia" con su explosiva entrevista: llegó a asegurar que la Reina había incumplido una promesa de permitirle visitar su casa en Sandringham para discutir sus planes, dejándolo devastado.
La reina, el príncipe Carlos y el príncipe Guillermo están inmersos en conversaciones de crisis sobre cómo reaccionar ante la serie de acusaciones incendiarias desatadas por Harry y su esposa Meghan durante el especial de dos horas con Oprah Winfrey.
Los informantes del palacio, con la presión creciente para una pronta declaración, describieron un estado de "intensa conmoción y tristeza" porque el príncipe Harry había presionado el "botón nuclear de su propia familia, la está destrozando".
"La gente se está tambaleando. Hay muchas cosas que la gente quiere decir, pero nadie gana con una batalla de ojo por ojo. Los puentes deben construirse después de todo esto", destacó una fuente a Daily Mail.
El palacio de Buckingham preparó una declaración en la que destaca el amor de la Familia Real por la pareja, en un intento de evitar que las tensiones aumenten aún más. Sin embargo, la reina estaba dispuesta a no apresurarse sin una cuidadosa consideración durante la noche, según The Times.
El personal real se quedó despierto hasta las 3 de la mañana para ver la entrevista a través del enlace de video en vivo desde los EEUU. con una creciente sensación de horror y tristeza. Después, los empleados tuvieron que preparar sesiones informativas de los miembros de la Familia Real y acordaron que cualquier respuesta tendría que ser coordinada entre la reina, Carlos y Guillermo.
Cuando amaneció, se convocaron reuniones de crisis en las que participaron altos funcionarios y miembros de la realeza, en persona y por teléfono, así como mediante videollamadas. Lo más dañino, explican, son las afirmaciones de la pareja de que no solo no contaron con el apoyo de los miembros de la familia y el personal, sino que también se vieron afectados como resultado de una aparente agenda racista en su contra.
La duquesa de Sussex aseguró que ciertos miembros de la familia real británica expresaron dudas sobre el color de piel que tendría su primer hijo con el príncipe Harry, y reveló que durante ese embarazo tuvo pensamientos suicidas (la Casa Real se negó a ayudarla, según comentó).
La pareja relató su experiencia antes de apartarse de la monarquía británica, y Harry lamentó el deterioro de su relación tanto con su hermano, el príncipe Guillermo, como con su padre, Carlos de Inglaterra, de quien dijo que le ha "decepcionado".
El príncipe Harry, su esposa, Meghan Markle, y su hijo Archie están felices ante la llegada de un nuevo miembro a su familia, una niña. Según reveló la pareja, la pequeña nacerá este próximo verano. Para entonces, su hermano mayor, Archie, ya tendrá dos años, que habrá cumplido el 6 de mayo.
Un amigo de la pareja, Misan Harriman, ha compartido una nueva imagen de la pareja en redes sociales tras su mediática entrevista. En la imagen, aunque no se le ve la cara, aparece el pequeño Archie, uno de los protagonistas de la entrevista, abrazado a su madre. La foto pertenece a la sesión con la que la pareja anunció su embarazo el pasado 14 de febrero.
El autor ha querido felicitar a sus amigos por la llegada de su nueva hija. "¡Qué maravillosa noticia para celebrar el Día Internacional de la Mujer!", ha escrito junto a la imagen. Harriman fue el artífice del amor de la pareja pues presentó a Meghan hace años a un amigo que también conocía a Harry. Sin él es posible que la actriz y el príncipe no se hubiesen conocido.