Son 14 los años que ha estado buscando una familia china a su hijo. Fue secuestrado cuando tenía cuatro años y vendido a otra familia. Su caso conmovió al país y hasta inspiró una película. Ahora la policía lo ha localizado a 1.500 kilómetros de su casa. En los últimos seis años, en China, han desaparecido más de 8.300 niños.
Se abre la puerta y Sun Zhuo mira ansioso a su alrededor. Sin poder controlarse su padre corre hacia él y rompe a llorar en un llanto desgarrador. No quiere soltar a su hijo. Junto con la madre, los tres, se funden en un abrazo, que les ha costado 14 años y 57 días.
Se llevaron a su hijo cuando solo tenía cuatro años mientras jugaba cerca de su casa, en el este de China. Nunca dejaron de buscarlo.
Vendieron sus propiedades para financiar su investigación. Viajaron a casi todas las regiones del país y llenaron las calles de carteles con su cara. No descansaron ni un solo día desde esa mañana de 2007.
Su historia llegó incluso a los cines, con una película que logró conmover a millones de personas.
Pero no fue hasta octubre de este año cuando la policía localizó a su secuestrador. Había vendido a su niño a otra familia. Ahora, Sun le saca una cabeza a su madre.
El reencuentro ha sido esperado pero agridulce: el chico no volverá a casa. Quiere quedarse con la familia con la que vivió, todos estos años.
En los últimos seis años, en China, han desaparecido más de 8.300 niños.