El padre de la directora de fotografía Halyna Hutchins, asesinada de manera accidental por el actor estadounidense Alec Baldwin, ha hablado por primera vez desde que el jueves se produjera el fatal accidente en el que su hija, de 42 años, perdía la vida.
Anatoly Androsovych ha hablado, roto de dolor por la trágica perdida. El hombre ha querido dejar claro que Alec Baldwin no fue el responsable de la muerte de la directora.
Para Anatoly, los responsables son los miembros del equipo de armería de la película, que tenían que supervisar las armas, y que fueron los responsables de que al actor se le entregase un arma que estaba cargada: "No responsabilizo a Alec Baldwin, es responsabilidad de las personas de utilería que manejan las armas".
El padre de Halyna ha narrado los dolorosos momentos que están viviendo en su familia: "Todavía no podemos creer que Halyna esté muerta y que su madre se esté volviendo loca de dolor". Además, también ha hecho hincapié en el sufrimiento del hijo de la víctima, que está "perdido sin su madre".
Ahora, Anatoly está luchando para intentar que su esposa Olga y su hija Svetlana puedan entrar a Estados Unidos y servir de apoyo al marido de Halyna, Matthew, y al pequeño Andros, quien con solo 9 años se ha quedado huérfano, según Daily Mail.
Anatoly no es el único que ha querido eximir de responsabilidad a Baldwin. Su familia también le ha mandado un mensaje de apoyo en estos duros momentos, al igual que su amigo Santiago Segura.
Horas después del fatal incidente ya se ha conocido que fue un asistente de dirección, Dave Halls, el que le entregó el arma al actor, de 63 años, asegurándole que no estaba cargada con munición real. Según una orden de la investigación policial en curso, Dave Halls cogió el arma del carro, creyendo que estaba descargada, y se la llevó a Alec.
La pistola con la que se disparó fue una de las tres colocadas por la armera de la película, Hannah Gutiérrez-Reed. Precisamente unas palabras de esta mujer antes del accidente han salido ahora a la luz y han sembrado la polémica en redes sociales.
La armera admitió que no estaba segura de estar lista para el trabajo en una entrevista antes de que comenzara el rodaje de la película: "Casi no acepté el trabajo porque no estaba segura de estar lista, pero al hacerlo, fue muy bien".
En la entrevista también confesó que lo "más aterrador" para ella era cargar espacios en blanco en un arma, ya que "no sabía como hacerlo". Para lograrlo había necesitado la ayuda de su padre, el legendario armero Thell Reed, que le ayudó a superar el miedo.