El padre Pedro Opeka, misionero argentino conocido por su labor social en Madagascar, ha sido nominado para el Premio Nobel de la Paz 2021. Ha sido el primer ministro de Eslovenia, Janez Jansa, quien ha nominado a Opeka por su dedicación a "ayudar a las personas que viven en condiciones de vida espantosas".
El padre Pedro Opeka, nacido en Buenos Aires, Argentina, en 1948 de padres refugiados eslovenos, fundó en 1989 la asociación Akamasoa, que significa "buen amigo" y que ha proporcionado 4.000 casas a personas sin hogar y ha ayudado a educar a 13.000 niños y jóvenes. El Papa Francisco visitó la 'Ciudad de la Amistad' de Opeka, construida sobre un basurero en las afueras de la capital de Madagascar, Antananarivo, durante su visita apostólica al país en septiembre de 2019.
El padre Opeka trabaja como misionero en Madagascar desde 1976. La situación de tantas personas en los suburbios de Antananarivo, especialmente en los vertederos, de los que tanta gente vivía, le llevó a fundar aldeas, escuelas, bancos de alimentos, pequeñas empresas e incluso un hospital para atender a los pobres a través de la asociación Akamasoa.
Durante la pandemia de la covid19, Opeka ha estado trabajando para ayudar a las familias que han caído aún más en la pobreza como consecuencia de las medidas frente al coronavirus. Además, el misionero expresó su gratitud al Papa Francisco por su llamamiento a los países ricos a cancelar la deuda de los países pobres, en este momento de pandemia.
Esta no es la primera vez que el padre Opeka ha sido nominado para el Premio Nobel de la Paz. Los representantes del Parlamento esloveno lo nominaron también en el año 2012. Entre otros nominados al Premio Nobel de la Paz de este año se encuentran el movimiento Black Lives Matter, la Organización Mundial de la Salud (OMS), el disidente ruso Alexei Navalny, o la activista climática Greta Thunberg.