Marvin Rex Lake está en prisión acusado del homicidio en primer grado del bebé al que cuidaba, de solo un año en El Paso, Texas, EEUU. El condenado admitió que aplicó varias llaves de lucha libre al niño como castigo.
Marvin Rex Lake trabajaba cuidando a Ahren Joshua DeHart, de solo un año, y a sus dos hermanos mientras sus padres trabajaban. La madre del bebé declaró que el pasado 13 de abril su hijo estaba bien y que incluso llegó a verlo por las cámaras. Por la noche, ha relatado la mujer, el ahora condenado le llamó para decirle que el niño había vomitado sangre. Cuando ella llegó a casa, el pequeño estaba inconsciente.
En el hospital, los médicos diagnosticaron al bebé numerosas lesiones “agudas y no accidentales", según un comunicado de la Policía de Texas.
Ahren Joshua DeHart sufrió daño cerebral, hemorragia pulmonar y hematomas abdominales, además de una fractura de cráneo. Tras tres días en la UCI, los especialistas decidieron desconectarlo de su soporte vital y falleció el pasado 16 de abril.
El acusado de homicidio ha contado su versión de los hechos y ha admitido haberle hecho al bebé varias “llaves de lucha libre”. Ese día, ha narrado, estuvo viendo la tele con los niños. Se enfadó con Ahren por romper una almohada y le castigó golpeándole.
No midió su fuerza, ha dicho Lake. El bebé se le resbaló y se golpeó con el borde un mueble. "No le hice daño en la cabeza, solo le causé las heridas internas", ha intentado justificar según informa RT.
Sin embargo, según el médico forense que practicó la autopsia al bebé, este murió por homicidio intencional por un trauma. Desde el pasado 19 de abril, cuando se conocieron los resultados de la autopsia, Lake está en una prisión sin fianza de El Paso, a la espera de los informes de los otros dos hermanos que también tienen lesiones.