Tras casi tres meses de desabastecimiento y escasez de combustible en Venezuela, una situación que se estaba tornando dramática y que venía provocada por la paralización de las refinerías del país debido a la corrupción institucionalizada y el desfalco de PDVSA y la falta de importación de combustible debido al bloqueo impuesto por EEUU, Nicolás Maduro ha subido el precio de la gasolina en Venezuela para conseguir, dice "la normalización" del servicio. Venezuela es el país con mayores reservas probadas petrolíferas del mundo.
Hasta el momento, la gasolina estaba subsidiada por el gobierno casi en su totalidad y en la práctica era completamente gratuita convirtiendo a Venezuela en el país con la gasolina más barata del mundo. Así ha sido durante los veinte años de gobierno chavista y antes de eso, durante los gobiernos anteriores, el precio nunca alcanzó los estándares internacionales, permaneciendo siempre por debajo. El máximo histórico del precio del litro de combustible en Venezuela fue de 0,15 dólares en 1996.
El combustible subsidiado siempre ha sido un símbolo de progreso y “poderío” en el país que ostenta el título de poseer las mayores reservas certificadas de crudo del mundo, aunque a la larga ésta haya sido también una de las múltiples causas de la debacle de la industria.
Nicolás Maduro anunció que a partir del lunes 1 de junio comenzará a venderse el combustible traído en los cinco buques iraníes la pasada semana en las 1.500 gasolineras de todo el país, y habrá dos modelos de precios:
- Un precio subsidiado: 5.000 bolívares (la moneda nacional) por litro. En la práctica continúa siendo gratis porque al cambio apenas son 0,025 dólares. Este precio tendrá un límite de hasta 120 litros mensuales por coche. En el caso de las motos, el máximo será de 60 litros. Si un vehículo supera ese límite, podrá continuar comprando gasolina a precios internacional (0,5 dólares por litro). El subsidio por parte del Estado sigue siendo alto, del 99,5% respecto al precio estándar en el extranjero.
- 200 gasolineras a precio internacional: que el gobierno de Maduro ha establecido en 0,5 dólares el litro (por debajo del precio en Colombia, por ejemplo, que se encuentra a 0,63 dólares por litro). Es la primera vez en Venezuela que se habilitan estaciones de servicio con venta de combustible “Premium” a precio internacional y con la posibilidad de pago en divisas. Además, estas gasolineras estarán gestionadas por empresarios privados que están importando su propia gasolina al país.
Para el caso del transporte público y de carga, el precio seguirá subsidiado al 100% durante los próximos tres meses con el objetivo de que se mantengan los precios en los billetes y en los alimentos y de esta manera el usuario no se vea afectado.
A partir del lunes 1 de junio comenzará a regir el nuevo método de abastecimiento en todo el territorio nacional y durante los primeros treinta días, y para no colapsar el sistema, habrá un régimen de control por número de matrícula para poder llenar el depósito de los vehículos. Es lo que en Venezuela llaman el “pico y placa”, y se pondrá en marcha de la siguiente manera:
El lunes podrán surtirse los vehículos cuya matrícula acabe en 1 y 2; el martes, los que su placa acabe en 3 y 4, miércoles, 5 y 6; jueves, 7 y 8 y viernes 9 y 0. Y así vuelta a empezar. No queda claro quién podrá surtirse los fines de semana y tampoco especificó si en las 200 gasolineras habilitadas para divisas y a precio internacional también regirá este sistema.
“Venezuela debe avanzar más temprano que tarde al cobro de la gasolina a precio internacional para evitar que nos la roben desde Colombia y el Caribe”, señaló Nicolás Maduro desde su alocución desde el Palacio de Miraflores. Y acusó al presidente de EEUU, Donald Trump, de poner en marcha desde su llegada “una política supremacista de agresión contra la economía del país y contra la industria petrolera”.
Durante esta misma intervención, el mandatario señaló importantes anuncios sobre el plan de flexibilización de la cuarentena en Venezuela por la pandemia del coronavirus. El nuevo plan comenzará el próximo lunes 1 de junio e implementará un método que Maduro llamó “el método venezolano de 5 más 10”, que consistirá en tener cinco días de flexibilización organizada y disciplinada y luego diez días de cuarentena.
En esta primera etapa serán nueve los sectores que se reactivarán a partir del lunes: las entidades bancarias, los consultorios médicos y odontológicos, las ferreterías, las peluquerías, el textil y el calzado, los talleres mecánicos, la industria de las materias primas químicas, los servicios personalizados como la fontanería, electricista, etc; y el transporte.
El plan “5x10” se aplicará a todo el territorio nacional salvo en las fronteras con Colombia y Brasil así como en los municipios de Maracaibo y San Francisco, en el Estado Zulia, al occidente del país; por ser los principales focos del virus en el país.
El método que aplicará Venezuela se basa en el que idearon un grupo de científicos del Instituto Weizmann de Israel que, en este caso, proponían un modelo cíclico 10x4. Cuatro días de flexibilización y diez de cuarentena para ir retornando a la normalidad poco a poco sin expandir el virus y el número de contagios de manera descontrolada.
Este modelo, lo que hace es, según estos científicos, tener en cuenta el periodo de latencia del virus, es decir, el retraso promedio de tres días entre el momento en el que una persona se infecta y el momento en el que puede contagiar a otros. De esta manera, según este método cíclico, si una persona se contagia en sus días de trabajo o cuando está realizando sus actividades cotidianas fuera, estará dentro de su periodo de latencia y solo alcanzará el pico de la infección en casa, cuando no está en contacto con nadie sino cumpliendo de nuevo los días obligatorios de cuarentena.
Nicolás Maduro aseguró que durante el resto del fin de semana continuará dando detalles de este plan de desescalada.
Por su parte, Juan Guaidó, el reconocido como presidente Encargado de Venezuela por más de 50 países, no tardó en reaccionar a través de su cuenta de Twitter para criticar la medida histórica.
Guaidó aseguró que “el anuncio del dictador es uno de los golpes más duros que ha recibido el pueblo venezolano en su historia”. Y convocó a sus diputados a realizar una sesión (virtual) extraordinaria de la Asamblea Nacional para decidir juntos qué hacer frente a esta nueva situación y manifestar su rechazo.