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Bianca Voss, una mujer de 75 años de Nueva Jersey, Estados Unidos, ha acusado a su doctor de "violación médica" por usar en secreto su propio esperma para fecundarla y dejarla embarazada hace casi cuatro décadas, según informa Daily Star. La afectada asegura que ha descubierto la verdad después de que su hija se realizara una prueba de ADN (test 23andMe).
Voss presentó una demanda este martes en una corte federal de Nueva York y afirmó que el doctor Martin Greenberg llevó a cabo una "violación médica" cuando ella visitó su clínica de Manhattan en 1983 con la esperanza de que pudiera quedar embarazada con esperma donado por un hombre anónimo.
Los hechos le han producido a la mujer "ansiedad debilitante y dolor emocional", según consta en la demanda. Se siente "victimizada". "Quería a alguien anónimo", dijo Bianca Voss ante los periodistas este martes.
Tanto Bianca como su hija Roberta han afirmado estar "devastadas" por el presunto delito. "El doctor Martin Greenberg insertó su propio esperma en esta paciente, Bianca Voss. Lo hizo sin su consentimiento y en contra de sus deseos. Algunas personas llaman a este acto 'horrible violación médica', pero independientemente del nombre, la atroz e intencional mala conducta del acusado es poco ética, inaceptable e ilegal", ha subrayado la denuncia del abogado de la mujer, Jason Kane.
"Él dijo, '¿Te importa que el donante sea judío?' Y dije 'no' y eso fue todo. Pensé que podría ser un estudiante de medicina del hospital, pero eso fue todo. Luego me pidió el cheque para cubrir al donante", ha explicado Voss ante la corte federal, según Daily Voice.
La hija de la afectada, Roberta Voss, ha señalado que "es horrible mirarse en el espejo y ver a la persona" que ha violado a tu madre. "Veo su rostro cada vez que me miro al espejo. Estoy confundida acerca de quién soy, lo que esto significa y qué tipo de persona haría esto. ¿Y eso es parte de lo que soy? ¿Y qué hay de mi hijo?", ha añadido, en un duro testimonio.
La demanda indica que "el demandado se paró junto a la demandante, que estaba con las piernas abiertas por la atención médica, e insertó sus propios fluidos corporales en ella. La demandante nunca había accedido a permitir que el demandado usara su propio esperma para fecundarla". Agrega además que "el acusado usó su posición de confianza y autoridad para insertar su esperma en la demandante, por lo que violó su juramento como médico".
La demanda no constata una cifra en dólares solicitada, pero señala que "la cantidad en controversia excede los 74.000 euros, sin incluir intereses y costes". Además de los daños monetarios, Voss y su hija quieren saber más sobre el historial médico de Greenberg. "Consciente de que el hijo de Greenberg, desafortunadamente falleció a una edad temprana, ella quería saber si podía haber heredado una condición médica preocupante y saber si podría transmitirla a su hijo", subraya el documento.