En pleno fragor de los atentados en Afganistán tras la toma del poder de los talibanes, el mejor aliado de los policías españoles desplegados para la evacuación del aeropuerto de Kabul fue un militar británico criado en Murcia.
Recién llegado al aeropuerto de Kabul se topó con policías nacionales. Este militar británico tiene los colores de España bien tatuados en el corazón porque creció junto al Mar Menor.
Por eso Harry no dudó en prestarse a echar una mano. Y vaya si ayudó porque Harry se quitaba horas de descanso para ubicar a colaboradores de España, a 10 kilómetros del aeropuerto, hasta donde GEO no tenían autorización para salir.
Un héroe, de 22 años, y acento murciano, con una conciencia que le animó a ayudar a esos compatriotas.