La guerra de Ucrania sigue sucediéndose a costa de inocentes. 54 días después de la invasión, Rusia continúa bombardeando sobre la población civil, matando a decenas de personas, arrasando ciudades y destruyendo lo que encuentra a su paso. Nuestra compañera de Informativos Telecinco Laura de Chiclana y el cámara Mariano Burattini nos ofrecieron unas duras imágenes de cómo ellos mismo se veían obligados a correr para huir de las bombas en Járkov, que finalmente alcanzaron varios edificios civiles.
Unos instantes terroríficos, en los que el único pensamiento posible era tratar de sobrevivir. "En esos instantes miraba a mi cámara, intentaba buscarlo, estábamos completamente atemorizados", explica Laura de Chiclana. "Es como una pelota que te tiran y que se va acercando cada vez más a ti", recuerda.
Momentos de huida, de desesperación y de tratar de refugiarse para no ser alcanzando por ningún misil. "Estábamos completamente rodeados. Estábamos debajo de los bombardeos", afirma. Rusia sigue bombardeando a la población civil, indefensa, y tampoco respeta el trabajo de los periodistas, protegidos por el Derechos Internacional Humanitario, que se juegan la vida por el derecho a la información de los ciudadanos. "Es un terror que te paraliza, a la vez que te hace correr. Las bombas seguían cayendo a nuestro alrededor y fueron más de diez".
"Por más que corríamos de un lado a otro, nos estaban rodeando", cuenta la reportera. "Fueron momentos terribles". Los militares ucranianos intentaron protegerlos y ayudarles, pero ni siquiera ellos pudieron: "Sabían que éramos objetivos, nosotros y el resto de ciudadanos", narra.
Los objetivos de Rusia siguen siendo los civiles. Los misiles de las tropas de Vladimir Putin se están cebando con ciudades como Járkov, donde más de 25 personas civiles han muerto y más de 130 han resultado heridas, algunas de gravedad, desde que comenzaran los ataques indiscriminados, el pasado viernes. La guerra de Ucrania continúa a la vez que el terror y la desesperación de los civiles, exhaustos de huir del fuego enemigo.