Jari Jones y Corey Kempster son dos transexuales, novias, modelos y activistas de la comunidad LGBTI pero la felicidad y estabilidad de la que ahora gozan no la consiguieron con facilidad, hay una emotiva historia detrás de ellas.
Eran compañeras de clase de la universidad y fuera de ella grandes amigas. Un día planearon un viaje a la playa y fue en el cuando se dieron cuenta que compartían diversos aspectos de su vida. Ambas se sentían más cómodas bajo el espectro femenino aunque hasta ese momento habían vivido bajo el masculino.
Decidieron transicionar juntas, el amor y la confianza que se tenían hizo que el proceso fuera menos difícil y doloroso, les ayudaba a lidiar con los prejuicios, las miradas y la desidia. En 2016 Corey comenzó a vestir faldas y blusas y Jari a cambiarse de no binario.
Convirtieron su historia personal en activismo. Jari Jones es actriz trans, afrodescendiente, modelo de "cuerpo positivo"; su discurso de igualdad ha llegado hasta la industria del entretenimiento y la moda. Corey es activista y consejera para jóvenes LGBT, auda a aquellos que están experimentando falta de vivienda y dificultades en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, y también ha participado en pasarelas, además que modela y actúa informa La República.