Los incendios forestales siguen calcinando Grecia, después de una semana bajo una ola de calor inusitada y tras registrase más de 80 focos en las últimas 24 horas. Aunque los bomberos han conseguido controlar algunos fuegos, el viento ha reavivado unas llamas que acorralan las joyas arqueológicas del país.
Pero, lo peor está por llegar. Eso al menos es lo que opina el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis. Mientras, en el país las evacuaciones al límite se suceden, aunque hay quienes se resisten a abandonar sus casas, rodeadas por el fuego.
"El país se enfrenta a una crisis ecológica sin precedentes, con numerosos incendios de grandes proporciones en distintas regiones", ha dicho el primer ministro griego después de visitar de la histórica ciudad de Olimpia, que el miércoles tuvo que ser evacuada ante el avance sin freno de las llamas.
El fuego se ha vuelto a reavivar a las afueras de Atenas, tras una ligera tregua en las últimas horas, y han obligado a la evacuación de más localidades en todo el sur de Grecia, después de que la ola calor y los fuertes vientos hayan empeorado aún más la situación a pesar de los esfuerzos de bomberos y equipos de emergencia.
En su visita a la región de Élide, situada en la península del Peloponeso, Mitsotakis ha reconocido el valor y el trabajo de quienes han estado luchando contra el fuego, en especial de aquellos que han evitado que las llamas afectaran a la ciudad de Olimpia, escenario de los Juegos Olímpicos de la antigüedad que alberga importantes ruinas arquitectónicas de hace más de 3.000 años.
Una fuerte ola de calor sin precedentes golpea el sureste de Europa. Además de Grecia, donde en los últimos días se han llegado a registrar temperaturas quehan alcanzado los 47 grados en algunas partes, otros países como Turquía y Albania están haciendo frente a unos incendios que han dejado ya víctimas mortales.