Paula Donnelly, una mujer de 42 años, ha narrado la terrible experiencia que sufrió el pasado 2019 tras conocer a través de la aplicación de citas Tinder a James McNutt, un hombre de 33 años, que se volvió totalmente obsesivo y paranoico con ella.
El agresor encerró a la víctima en su domicilio de Birmingham, Reino Unido, después de que ella decidiera dejar de verle por su actitud obsesiva. Cerró todas las puertas y ventanas y durante seis horas abusó sexualmente de su exnnovia.
Los hechos sucedieron en 2019 y tras lo sucedido, James fue declarado culpable por un delito de violación, y condenado a 13 años de cárcel. Ahora, su víctima ha querido dar la cara y expresar los terribles momentos de angustia que vivió con este monstruo, según ha recogido The Sun.
Paula tuvo que llegar a fingir estar muerta para que el agresor detuviera sus abusos. Así, mientras la violaba y asfixiaba, por un momento creyó que había muerto y entró en pánico. Gracias a su actitud pudo detener los abusos, y el acusado se marchó de casa tras el engaño. Finalmente fue detenido por las autoridades y continúa cumpliendo su condena por violación. Por su parte, la víctima ha sido diagnosticada con trastorno de estrés postraumático tras el terrible suceso.
Actualmente es muy habitual relacionarse a través de aplicaciones de citas como Tinder, en las que personas desconocidas quedan para intentar empezar una relación o para mantener un encuentro de sexo fortuito. Y con su uso también han aumentado los riesgos que conlleva. No es la primera vez que ocurre una tragedia como esta después de una cita a través de la app: el pasado noviembre se juzgó a un hombre por estrangular a su cita mientras mantenían sexo.
Por todo ello, desde Tinder han querido ofrecer una solución que de un poco de seguridad a sus usuarios, creando el botón del pánico, que envía una alerta a la Policía si la cita es una trampa o si tu vida corre peligro, compartiendo tu ubicación a tiempo real.
Esta nueva medida se une a la también adquirida recientemente por la plataforma para el colectivo LGTBI, al que alertará cuando viajen a países donde se les criminaliza para que sean conscientes de la situación a la que pueden llegar a exponerse.