La guerra en Ucrania no distingue entre militares de civiles, una escena que describe el miedo y la tensión que viven las familias ucranianas. Los soldados ucranianos van casa por casa para rescatar a los habitantes de Makárov, a unos 70 kms. de Kiev. En una vivienda se encuentra a una madre y sus dos hijas pequeñas que siguen en la casa. Tiene que evacuarlas a toda prisa, mientras se escuchan cada vez más cerca los bombardeos.
Los bombardeos rusos ya han llegado a esta localidad de Makárov, y no hay tiempo que perder para sacar a la población de la zona de fuego. Los soldados de las fuerzas especiales entran a la carrera a las casas para evacuar a todos los que puedan y cuantos más mejor.
Un soldado orienta a la madre sobre qué llevar en una maleta pequeña que facilite la evacuación. "Coja cosas para las niñas, pañales, le dice". "Comida para un día, por si acaso."
El militar saca tiempo para recordarle a las pequeñas también que no olviden sus juguetes favoritos. aquí, el abuelo, dice el soldado, no va a jugar con ellos. Descubrimos así, la dramática situación, en este plan desesperado de evacuación en el que el abuelo no entra.
Mientras la madre y la mayor de las niñas intentan coger los juguetes y lo imprescindible, la pequeña anda intrigada con la cabeza del soldado...quiere ponerse el casco...quiere jugar. Cargan en la furgoneta lo imprescindible....y meten prisa a una madre que deja toda su atrás...No hay tiempo...venga, venga al coche dicen nerviosos...los bombardeos se escuchan ya demasiado cerca.